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𝐋𝐞𝐢𝐥𝐚:
Después de una conversación agobiante con Hermione y unos días de descanso llegué a la conclusión de que si Cedric quiere estar conmigo tendría que decírmelo y actuar dejándose llevar por sus sentimientos. Que diga lo que realmente quiere hacer en vez de dar tantas vueltas. Pero de lo contrario, si no quiere estar conmigo entonces yo no tengo nada que hacer, tampoco lo voy a presionar para que me ame, no es lo correcto. A pesar de todo este ultimo tiempo sin él me hizo darme cuenta de cuanto lo extraño, de cuanto extraño su sonrisa y su alegría matutina
Decidí salir al patio cerca de la cabaña de Hagrid para respirar un poco y dejar de pensar tanto. En el camino me encontré con el trió de Oro volviendo de esa misma cabaña
- ¿Por qué esas caras, que ocurrió? - Dije al ver el ceño fruncido de Hermione
- Van a sacrificar a Buckbeack - Dijo Ron
- Estábamos yendo al patio de la torre del reloj para charlar un rato y descansar, ¿Nos acompañas? Tenemos información que contarte - Asentí y los tres caminamos de vuelta al castillo
𝐂𝐞𝐝𝐫𝐢𝐜:
Tras unos días pensando me di cuenta que Leila si me gusta, y mucho, me hace sentir cosas que nadie me hizo sentir. Me hizo extrañarla y querer tenerla al lado mío en tan poco tiempo, pero tendríamos que hablar sobre lo de Cho porque hay algo que ella no sabe...
Mientras Leila estaba en Hogsmeade yo le pedí a Cho ser mi novia y... aun no le dije nada sobre Leila. Hoy mismo iré y le diré, después hablare con Leila y le pediré intentarlo. Últimamente no la he visto por ningún lado, supongo que me estuvo evitando. Caminé hacia el patio junto a Katherine y Paul para charlar y que me aconsejen
- Asegúrate de aclararle a Cho que no quieres volver con ella - Dijo Katherine a lo cual asentí
- Si Kat, prometo aclararlo
- Me alegra que hayas elegido a Leila, me le he cruzado varias veces y es una buena persona, felicidades amigo - Le sonreí, agradezco de tener a Katherine y a Paul cuando los necesito, son mis mejores amigos
- Gracias... - Desvíe mi mirada hacia la entrada de nuevo al colegio y ahí la vi. Leila salió del castillo junto a sus amigos y parece que no me vio. Yo sonreí automáticamente, necesitaba decirle que quiero que este conmigo
𝐋𝐞𝐢𝐥𝐚:
Estaba hablando con Ron sobre que banquete e Hogwarts tenia la mejor comida cuando sentí que alguien me observaba, al mirar hacia todos lados me encontré con los ojos de Cedric. Él sonreía y me miraba, yo sonreí al momento
- Ron, ¿Me esperas un minuto? - El asintió con la cabeza y me encaminé hacia donde estaba Cedric. Una vez estábamos uno al frente del otro él comenzó a hablar
- Yo... no se como decirte esto - Agache la cabeza con una leve sonrisa - Quiero estar contigo, quiero conocerte mejor y que vayamos lento pero que seamos algo - Mi corazón comenzó a latir muy rápido
- Pienso lo mismo - Le sonreí y estaba a punto de darle un abrazo pero se acerco Cho a nosotros
- Amor - Le dio un beso a Cedric - Te buscan en el Campo de Quidditch, tienes un partido dentro de poco y te hace falta practicar - Un nudo se formó en mi garganta. ¿Como puede ser tan...? Ni siquiera se molesto en alejar a Cho para que no me confiese en mi cara que yo estaba siendo engañada de tal forma. Una llama de furia se formó en mi interior queriendo gritar o romper algo - ¿Paso algo? - Los ojos de Cedric se volvían cristalinos y me miraba con tristeza. ¡Maldito mentiroso, actúa muy bien!
- No - Dije sin mirarla y de forma seca y fría - Se murió mi mascota y le contaba a Cedric, pero vayan yo voy a estar bien - Cedric estaba mudo, apreté mis uñas contra mi palma a tal grado de que en mi piel se abrió una ligera herida. Me había mentido y había jugado conmigo, que basura...
Cho agarro del brazo a Cedric y lo llevo lejos del patio. Yo busque con la mirada a los chicos pero no los encontré así que me fui a mi habitación. JA! No pudo mantener su mentira por mas de cinco minutos, increíble...
𝐂𝐞𝐝𝐫𝐢𝐜:
- Pienso lo mismo - Ambos sonreímos satisfechos. De la nada sentí una mano sobre mi hombro, al girarme me encontré con el cabello oscuro de Cho
- Amor - Me dio un corto beso en los labios - Te buscan en el Campo de Quidditch, tienes un partido dentro de poco y te hace falta practicar - ¡Mierda! Intenté explicar pero era como si mis palabras no pudieran salir de mi boca. Me quedé allí, con la boca medio abierta sorprendido e intentando calmarme para respirar sin dificultad - ¿Paso algo? - Sentí mis ojos humedecerse, la había cagado muy feo
- No - Dijo Leila mirándome directo a los ojos y de forma seca y fría - Se murió mi mascota y le contaba a Cedric, pero vayan yo voy a estar bien - Cho asintió y tirando del brazo me llevó hacia el campo de Quidditch pero antes de llegar a los vestidores me detuve
- Cho, espera, necesitamos hablar - Sostuve sus manos suavemente
- ¿Qué ocurre? - Pregunto con su voz aguda. Realmente no quiero hacer esto, no quiero lastimarla
- Últimamente han pasado cosas y quiero ser completamente sinceró contigo - No pude evitar agachar la cabeza mientras acariciaba sus manos lentamente con mis pulgares - Siento algo muy fuerte por Leila - Me miró mientras poco a poco sus ojos se iban mostrando cristalinos - Tu no te mereces alguien como yo, mereces que te cuiden y que te protejan, que te amen mas que nada y que estén dispuestos a hacerte feliz. Yo no soy esa persona y lo lamento muchísimo, pero antes que mentirte y decirte que no pasa nada prefiero decir la verdad
- Yo... agradezco que seas sinceró y... - Se alejo unos pasos lejos de mi y sacó sus manos de las mías - Lo lamento pero me duele, yo... permiso - Se fue corriendo devuelta al castillo
- Ay Cedric Diggory, ¿Por qué eres así? - Pensé en voz alta. A pesar de que no tenia ganas de jugar Quidditch soy el capitán de mi equipo así que tenia que entrenarlos. Ademas me vendría bien para distraerme por lo tanto camine a paso lento hacia los vestidores donde mi equipo me esperaba
