✦ Capitulo 9: La primera prueba, la primera baja ✦

4.7K 361 44
                                    

𝐋𝐞𝐢𝐥𝐚:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝐋𝐞𝐢𝐥𝐚:

Hogwarts... el colegio mas seguro para los niños y adolescentes... sin contar los ogros, profesores con doble personalidad, serpientes gigantes, cámaras secretas, asesinos sueltos, hombres lobo y un sin fin de peligros mas. Ahora hay que sumarle dragones, ya que Harry descubrió que Charlie Weasley trajo sus mascotas para la primera prueba del Torneo. No solo estaba preocupada por él, si no que también por Cedric. Las cosas entre nosotros empezaban a mejorar después de todo aunque no serviría de nada si muere allí dentro...

- Lo harás bien, confió en ti - Le dije en un tono dulce acariciando su cabello, ambos estábamos nerviosos porque hoy seria la primera prueba 

No estoy tan seguro de eso... - Se le notaba ansioso pero con miedo. Nos encontrábamos en un pasillo vació de Hogwarts cercano a la salida que conduce al lugar del torneo

- Tienes que confiar en ti mismo, allí fuera estarás solo y tu vida dependerá de ti - Puse mis manos sobre sus hombros haciendo que me mirara para dedicarle una sonrisa - Es una lastima que no pueda estar en las gradas para apoyarte

- ¿Por qué no irás? - Preguntó confundido

- Dumbledore creyó que, por el momento y al no saber mucho sobre mi situación, me aleje de los animales mas grandes y mas propensos a ser lastimados - Suspiré y nos quedamos unos segundos en silencio, no quiero perderle pero este estúpido torneo es una ruleta rusa que juega con la vida de las personas. De igual manera no me puedo quejar debido a que ellos desearon participar - Estaré en la torre de astronomía, cuando haya acabado nos volveremos a ver - Intenté tranquilizarlo pero a decir verdad yo también estaba algo intranquila

- Bien... - Se acercó a mi hasta envolverme en sus brazos - Cuando termine iré a buscarte y festejaremos juntos ¿De acuerdo? - Me separó nos pocos centímetros para verme a los ojos

- De acuerdo - Sonreí levemente para después posar mis labios sobre los suyos uniéndonos en un delicado pero necesitado beso. No sabíamos si era el ultimo pero no lo tomamos como una despedida. Finalmente se separó y respiro hondo antes de irse

- Deséame suerte - Comenzó a caminar hacia atrás intentando mantener una sonrisa

¡No la necesitas! - Le grité antes de que desapareciera totalmente de mi campo de visión. Una vez sola caminé hacia la torre de astronomía


●●●


Mi estomago se revolvió, a pesar de la distancia se podían escuchar los gritos de las personas allí fuera apoyando a los campeones que arriesgarían su vida en esta primera prueba. La gente gritaba enloquecida dándome el  nombre del primer campeón que saldría contra su dragón

"¡Diggory, Diggory, Diggory!" 

La sangre dentro de mis venas hervía pero no de enojo, si no de impotencia. Impotencia por no poder hacer nada para salvarlo, no poder estar allí apoyándolo o ayudándolo para que salga sano y salvo. Los gritos aumentaron por lo que supuse que Cedric ya había salido. La tensión dentro de mi cuerpo aumentaba con cada segundo, sentía un hormigueo constante en cada extremidad y mi respiración comenzaba a ser dificultosa. En un primer momento creí que era por los nervios de que Cedric saliera lastimado pero cuando mis ojos comenzaron a doler y sentía mi garganta quemarse entendí rápidamente que no se trataba de él

Pestañeé varias veces frotándome los ojos hasta que mi vista se nubló totalmente por unos segundos. El miedo inundó cada espacio de mi cuerpo en un intento desesperado por devolverme la vista. De un momento para el otro mis ojos volvieron a abrirse pero ya no me encontraba en la torre de astronomía, si no que estaba entre un montón de rocas, rodeada por unas gradas y encadenada a unas piedras. Tenia metros de altura y en frente de mi Cedric corría de un lado al otro. Quise correr, irme, pero no tenia control sobre mi cuerpo. El dolor estaba comenzando a derribarme, tal así que sentí como me derrumbaba por dentro. Sentía como iba perdiendo poco a poco la fuerza y la resistencia que en un primer momento puse. Estaba muriendo sin darme cuenta del todo. Pestañeé una vez mas y volví a la torre de astronomía, el dolor se calmaba lentamente, la tribuna estalló en gritos y aplausos, Cedric había conseguido salir vivo

No pude evitar sentirme aliviada y contenta de que él había salido victorioso, sin embargo yo aun seguía en el suelo, derribada por el dolor, entonces una idea vino a mi mente. En la enfermería se encontraba la señorita Pomfrey, esperando para atender si algún campeón salia lastimado. Si puedo llegar hasta ella capaz me de un calmante o algo por el estilo, capaz me ayude

Intenté incorporarme pero era inútil, no tenia la fuerza suficiente, me arrastré hasta llegar a la primera escalera de caracol pero escuché de vuelta como la gente allí presente estallaba en gritos. Viktor Krum había salido. Una vez mas mi vista se nubló mientra me retorcía del dolor, sentía como cada parte de mi cuerpo pedía auxilio desesperada-mente y mis piernas se doblaban a tal punto que pensé que se iban a romper. En los ojos del nuevo dragón vi como Viktor me lanzaba un hechizo haciéndome tambalear y caer torpemente. Seguido a eso volví a estar en la torre de astronomía, el dolor se volvió a calmar y escuche como de lejos la gente volvía a festejar, Viktor había conseguido salir vivo

Sin mas rodeos me arrastré por la escalera con cuidado de no caerme. Con un poco de esfuerzo llegué al suelo de vuelta, pero aun faltaba otra escalera mas que era un poco mas sencilla que la que acababa de bajar pero mas larga. Antes de avanzar un centímetro mi vista se volvió a nublar, no se cuanto tiempo mas podré aguantar esto. Mi cuerpo se retorció tanto del dolor que tuve que ponerme en posición fetal para calmarme un poco. Ahora era el turno de Fleur, a quien la vi corriendo entre las rocas con su falda llena de polvo. Desde un extremo me tiro un hechizo y los ojos del dragón se cerraron impidiéndome seguir viendo lo que ocurría.

Pocos segundos después volví a ver los escalones de la ultima escalera. Miré mis manos, las venas en mi muñeca latían con fuerza y todo mi cuerpo temblaba del miedo, no quiero seguir sufriendo de esta manera. Con todo el esfuerzo y el impulso dentro de mi me levanté del piso sujetándome de la baranda, me quedaba un largo camino hasta la enfermería y ya no me quedaba tiempo, no iba a llegar. De igual manera fui bajando débilmente escalón por escalón lo mas rápido que podía pero mis ojos se volvieron a nublar y lo que sentí dentro de mi... lo que sentí...

Vi a Harry agarrando su escoba con un hechizo rápido y maniobrando por entre las rocas para agarrar el huevo de oro que el dragón protegía. Este ultimo lanzaba llamas gigantes de su boca enfurecido. Volví a ver la escalera frente a mi pero estaba petrificada del dolor, y sin aguantar un segundo mas me solté del barandal, dejándome caer escalón por escalón rodando por la fría madera cuesta abajo y comenzando a sangrar. En ese momento mi único pensamiento fue Cedric, él ya esta a salvo... por ahora...

Al llegar al final de la escalera, después de estar como tres pisos rodando hacia abajo, cerré los ojos dejándome vencer por esa gran necesidad de quedarme dormida. Ya no había murmullos ni susurros, ni el sonido de la respiración, todo se fue. El silencio es ausencia, como la luz en la oscuridad, nos muestra lo que no hay, lo que no está

Todo se fue... y el resto es silencio...

𝐒𝐨𝐦𝐞𝐭𝐡𝐢𝐧𝐠 𝐂𝐨𝐧𝐟𝐮𝐬𝐞𝐝¹ │ Cedric DiggoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora