You my happyness

Prólogo.

Harry Potter es un chico que creció sin amor, luego del accidente automovilístico que tuvieron sus padres fue criado por sus tíos que lo consideraban una molestia y un inútil pero él fue un chico fuerte y quiso demostrarle a su “familia” que podía ser más, que podía ser alguien importante, valorado por otros y con un futuro brillante y prometedor.

Draco Malfoy es un niño arrogante que nació en una familia que en sus momentos más brillantes fue una de las más importantes de Gran Bretaña pero que cayó en decadencia por las malas acciones de sus padres y seguir a las personas incorrectas, pero que criaron a su único hijo como todo Malfoy debía ser: prepotente, vanidoso, siempre mejor que el resto, sereno, calmado y nunca mostrar sus emociones ante los demás. Pero en sus vidas no había amor, eso era irrelevante, y Draco en una pequeña parte de su corazón añoraba ser amado.

Con dos vidas tan distantes y un destino caprichoso de por medio no debería extrañarnos que sus vidas se entrelazaran. ¿Cierto?