¡Te odio Fred Weasley! ✓

epílogo

¡Te quiero Fred Weasley!

Era tiempo de volver a casa. Megan viviría con Violet este tiempo, ella estaba más emocionada que su amiga, hablaba todo el tiempo de lo que harían en las vacaciones y lo mucho que le gustaría vivir cerca del mar.

Megan estaba emocionada también, solo que no quería irse aún, vio las maletas empacadas en el pie de su cama y sintió nostalgia, sería un verano largo. Y lo disfrutaría, en el cielo no había ni una nube, era un día agradable.

Violet había conseguido un compartimiento para ellas solas ella leía el profeta indignada mientras que Megan miraba por la ventana viendo pasar el paisaje, tocaron la puerta del compartimiento y ella alzó la mirada, una sonrisa se formó en su rostro. Fred entró y se sentó junto a Megan besándola apasionadamente, Violet cubrió su rostro con el diario.

-¡Iugh! No en frente mío por favor.-Fred se separó dándole un último beso y sonrío.-Los dejaré solos, iré con Adam (El chico de Hufflepuff, actual novio de Violet).-Ella cerró la puerta del compartimiento y se alejó dejando a Fred y Megan solos.

-¿Cómo te sientes?-Le preguntó el mientras pasaba una mano por su cabello pelirrojo.

-Bien.-Sonrío ella.-Desearía decir lo mismo que los demás.-Hizo una mueca.

-La muerte de Cedric Diggory no es culpa de nadie.-Megan asintió, recostó la cabeza en el hombro de Fred mientras miraba por la ventana. Ambos se quedaron en silencio disfrutando la compañía del otro.

-Te extrañaré este verano.-Habló ella, él la miró con ternura.

-Yo también lo haré, mucho.-Ella sonrío feliz, el tomo su mano y entrelazaron los dedos, en el camino hablaron de lo que harían en el verano, él le prometió escribirle casi a diario más tarde apareció Violet con George y los cuatro comenzaron con una agradable conversación.

El tiempo parecía haber pasado más rápido de lo que los cuatro esperaban, cuando volvieron a mirar por la ventana ya se encontraban en King's Cross, tomaron sus cosas y bajaron del tren, Violet corrió a abrazar a sus padres, su hermana pequeña, Carrie la saludaba con la mano, su cabello rubio repleto de rizos se asemejaba a el de su madre, Violet era la imagen y semejanza de su padre.

Megan les sonrió a ambos, Fred aun tomaba su mano como negándose a dejarla ir, ella volteo y lo miró.

-Ven, quiero presentarte a mi madre.-Ella asintió y el la condujo hasta estar frente a una mujer pelirroja de baja estatura y regordeta, Megan sonrió aquella mujer emanaba ternura y amor por sus hijos.

-Tú debes ser Megan ¿No es cierto?-Ella asintió.-Eres más bonita en persona, lamento tanto lo de tu padre.-La mujer la abrazó como si se conocieran de toda la vida, ella sonrío.-Cualquier cosa que necesites ya sabes que puedes contar con nosotros.-ella asintió.

-Está bien Señora Weasley es usted muy amable.-La mujer sonrió hasta que sus ojos se achinaron hasta casi no verse, Megan saludo al padre de Fred y luego cuando estuvieron un poco más alejados él la miró.

-¿Responderás mis cartas?-Preguntó él.

-¿Me escribirás?-Preguntó ella risueña, el sonrío.

-Claro que si.-Beso su frente y la abrazo.-Quiero besarte.-Le dijo al oído.-Pero me avergüenza hacerlo frente a mi madre.-Ella carcajeo, se puso de puntas de pie y lo beso en la mejilla, él la abrazo dándole la espalda a su familia y le robo un beso.

-¿Y si te vio tu madre?-Preguntó ella riendo.

-No me importa, yo no la vi a ella así que aquí no sucedió nada.-Ella río aún más fuerte.-Eres mi novia tengo derecho.-Ella sonrío y le dio un corto beso en los labios.

-¡Meg!-La llamó Violet.

-Tengo que irme.-Dijo ella con deseos de no separarse de él.-Te escribiré.-Lo beso una última vez.-Te quiero Fred.

-Yo también.-Contesto el con una sonrisa.-No te metas en problemas.-Ella río mientras se acercaba a la familia de Violet, saludo a su madre, quien era alta y esbelta con su cabello rubio con algunas ondas y su padre quien era aún más alto de cabello negro y rizado.

La familia se subió a un auto muggle Violet se dedicó a pelear con su hermana pequeña todo el camino mientras que Megan miraba por la ventana. Al llegar a la casa todos bajaron del auto. Ella ya conocía la casa de su amiga, era de madera, pintada de blanco, grande y luminosa, tenía dos pisos y cuatro balcones, todos mirando al mar.

Violet tomó la mano de su amiga y la hizo entrar, sin dejarla apreciar la casa ella la hizo subir las escaleras y abrió una de las puertas de las habitaciones. Las paredes eran de un celeste pastel, todas estaban desnudas pero con varios marcos para poner fotos. Había un armario blanco junto a la puerta, un pequeño escritorio y la cama junto al balcón.

-Papá la arregló cuando obtuvo tu tutela.-Ella sonrió-¿Qué te parece?-Megan estaba sin palabras todo era perfecto.

-Me encanta.-Abrazó a su amiga con fuerza. Luego de agradecer a la familia la dejaron en la privacidad de su habitación.

Se dedicó toda la mañana y parte de la tarde a acomodar sus cosas, junto a la cama había cajas con sus pertenencias, ella supuso que el padre de Violet las trajo de su casa, luego de acomodar todo salió al balcón, admiró al mar y luego se acostó en su cama para luego quedarse profundamente dormida.

En la noche, luego de cenar llegó una lechuza a la casa, Megan tomó el royo de pergamino de la su pata y luego le dio agua y algo de comida a la lechuza quien chillaba con alegría y daba pequeños saltos. Ella leyó la carta.

Querida Megan:

Dije que te escribiría apenas llegara a La Madriguera, tú te burlaste de mí. Creo que me debes algo, ya encontraré la forma en que me lo pagues

Ella río y luego continuó leyendo.

Odio sonar tan cursi, y luego de que te fuiste note lo meloso que actué en estos días y me pregunto ¿Qué demonios me hiciste? Para luego responderme a mí mismo que me cautivaste y me convertiste en esta cosa atractiva y dulce.

-Egocéntrico.-Dijo con una sonrisa.

Juro que mientras escribo esto te imagino a ti susurrando "egocéntrico" seguramente lo has hecho.

Volvió a reír. La lechuza saltó y se quedó en la cama junto a ella, Megan acaricio su plumaje.

En fin, no me importa si suena cursi o tonto, pero es lo que siento. Apenas te fuiste sentí que algo faltaba en mí. Me pregunto qué hiciste para ser algo tan fundamental en mi vida. No quiero perderte Megan.

-Yo tampoco.-Susurró ella con ternura.

Y odio estar todo un verano alejado de ti solo viendo tu foto y conformándome con tus cartas.

Ella miró la foto que descansaba en su mesa de noche. En ella se encontraba Fred besando su mejilla y ella sonriendo.

No puedo esperar a verte. Oh con George centramos la forma de iniciar con los sortilegios Weasley, en otra carta te explicare más detalladamente, ahora tengo que terminar la carta.

No es porque tenga algo más que hacer si no que no sé qué demonios escribir, sinceramente desearía que estés aquí conmigo prefiero los hechos que las palabras. Sabes que te quiero y espero que aprecies mi esmero escribiendo esta carta. Enserio espero que lo aprecies.

Ella río.

Te quiero Megan, siempre...

Con cariño Fred.

PD: No desempaques demasiado. La próxima semana tú y Violet pasaran unas semanas en La Madriguera, si lo sé, amas mis sorpresas. Te quiero.

-Yo también te quiero Fred Weasley.

FIN.

La idea era terminarla de subir el viernes pero desde el viernes me quedo sin teléfono, por culpa de la profesora de inglés que me citó el vienes para evaluación virtual y yo no me voy a meter. Y ya tenía promedio rojo hasi que no me importa.