La Vuelta de la Humanidad

Extra: Una pequeña charla

Luego de la pelea de honor contra George, el Haireaki que todos conocían se había roto. Le costó un poco recuperar la compostura, la energía que antes le rodeaba.
   Para algunos no era tan malo, de alguna manera se había calmado. Pero no se sentía así, era alguien diferente al que entró en una zona gris japonesa a pelear. La tensión había bajado, la zona donde estaba el Arditch siguió intacta. Al parecer, la Furia China desapareció luego de derrotar al héroe japonés.
   Pero no era porque estuviese deprimido, o porque se había tomado la derrota muy a pecho, que para él lo fue; sino que había abierto una perspectiva que antes no tenía. Pensaba en muchas cosas, entendía otras. Se sentía débil, al descubierto, y eso le estaba dañando.

   Shigeo lo notó, por lo que lo llamó a su oficina en el Cuartel General, solo para tener una pequeña charla.
  -¿Me llamaste?-Le dijo, cerrando la puerta.
   -Sí, sí. Siéntate-Se levantó de su escritorio, agarrando una copa de vino-¿Quieres algo?
   -No, gracias.
   -Me dijeron que no has salido de tu cuarto durante un par de días-Haireaki asintió-Entiendo que tengas que... recuperarte, pero sigo sin entender qué te sucedió en la tarima.
   -Es... complicado.
   -Lo sé. Perdiste la pelea, y te acobardaste. Hiciste trampa para que la gente te siga odiando, ¿No es así?
   No dijo nada, pero su mente concordaba.
   -¿Y crees que cumpliste tu propósito?
   -Supongo-Dijo luego de un resoplido. Su corazón se estaba acelerando, su cuerpo estaba incómodo.
   -Entiendo que tu vida no fue fácil cuando pequeño, que la gente te temía y te odiaba solo por tu físico, por tu voz, y el contraste con tu forma de ser.
   -No le diría miedo, pero...
   -Como quieras decirlo, miedo, intimidación, inseguridad; da igual. Entiendo que hayas ocupado esa rabia para seguir adelante, que te hayas hecho de hierro, y te creyeras el cuento del villano-Se tomó un momento para tomar de su copa, y luego de un suspiro siguió-Y has avanzado mucho, te he visto crecer... Pero también te vi perder el control. La furia te terminó ocupando, el lobo que está en tu interior no se saciaba con el dolor constante que recibías solo por ser un dragón, por lo que buscaste más. Y se alimentó una, y otra, y otra vez. Hasta que en un momento te diste cuenta de que el dolor no era suficiente para dejarlo satisfecho, y que la furia que generaba no era suficiente para poder vencer a George. Es posible incluso que ahora no entiendas cómo se vive, porque...
   -No hay nada peor que sentirse como un fantasma-Le quitó las palabras de la boca-Ser un villano estuvo desde el principio, era mi forma de vivir, de superarme.
   -Y George te golpeó tan fuerte para que te dieras cuenta de que no era suficiente. Y tuviste que ocupar a Szel, ¿O no? No podías permitir que la gente te viera derrotado, y así seguir con el ciclo. Pero, déjame preguntarte algo, hijo-Se sentó frente a él-¿Por qué el cambio tan repentino? ¿Acaso te diste cuenta de que lo que sentías en realidad no era lo que sucedía? ¿Qué aunque George te odie, te sigue respetando? Porque yo sé por qué te ganó, lo discutimos con Mako, y La Sombra es algo que... nunca me imaginé ver de nuevo; pero no lo hizo, ¿Por qué no te dio el golpe de gracia? ¿Por qué no te atacó con su odio?
   Eso era lo que le molestaba al chino, George no ocupó la rabia que este le hizo crecer durante los años en la lucha, y no sabía explicarse por qué.
   -¿Qué querías conseguir con la pelea?
   -Poder ver su dolor-Shigeo se detuvo, no supo cómo seguir-Ver como lo hizo, encontrar su manera de seguir adelante.
   -¿Tú crees que George puede ver tu dolor?
   -No. Si fuera así todo esto no hubiera pasado. Si fuera así no sería el villano que todos dicen que soy.
   -¿Y lo eres?-Haireaki negó con la cabeza varias veces, acomodándose en el asiento-Dime una cosa, hijo ¿Cómo se siente ser tratado como un villano sin merecerlo?
   -Como la mierda-Soltó unas risitas, que aunque no era para nada chistoso, él lo encontraba así-Por eso me lo tomé en serio, por eso fui lo que querían que fuera, para...
   -Para olvidar el dolor-Este asintió-Todo se devuelve a lo mismo, ¿No? Al ciclo del dolor.
   -George no me entendería, nadie me entendería si lo transmitiera.
   -¿Estás seguro de eso?
   -Por supuesto, así funciona el ciclo, la única manera de entender el dolor del otro es... haberlo sentido también.
   -¿Y la lástima?
  -La lástima es para los ignorantes, para los egoístas. Con la lástima no llegas a nada, menos al entendimiento.
   -¿Y si alguien te dijera que siente lástima por ti?
   -Lo tomaría como un insulto, casi.
   -Pero, si alguien llegase a tu lado, y te dijera que todo lo que sufriste antes no tuvo que haber pasado, que la gente no tendría que haberte tratado así, ¿Qué harías?
   Haireaki lo pensó un poco: "Lo cuidaría con mi vida, porque sé que entienden, o quieren entender".
   -Pero, Haireaki, hijo, yo siento lástima por ti, porque todo lo que sufriste no tuviste que haberlo sufrido, que todo lo que te hicieron... dañaron a un niño inocente.
   -Sin embargo, no lo entiendes. Shigeo, yo te quiero, y lo sabes; pero yo no necesito tu lástima, yo no veo nada de lo que pasó en mi infancia como algo malo. Yo lo ocupé a mi favor.
   Y lo entiendo, pero eso mismo te llevó a todo esto. No creo que quieras pasarlo de nuevo. Quiero creer que de verdad quieres que la gente te respete por las cosas que haces, y que no te teman por como eres... en el exterior.
   -Sí, exactamente.
   Shigeo sacó una risa muda, mientras se levantaba.
   -Ahí está el problema, hijo mío. Quizás lo estuvo años atrás, con esa gente insegura que se intimidaba por lo potente que eras; pero ya no es así. La gente ya no teme por como eres, sino que de verdad lo hacen por tus acciones, el cuento de ser un villano ahora es tu problema, no de la gente. Está dentro de ti, no fuera-Sus ojos se abrieron completamente, eso era lo que sentía, lo que no podía a expresar con palabras, pero su senpai lo había dicho en la frase más sencilla-George no te peleó porque sentía inseguridad al verte, o miedo al presentarte; lo hizo porque tú mismo causabas su odio a la fuerza, y lo que pasó en la tarima lo explicó perfectamente. Él no derrotó a un villano, él derrotó al lobo en tu interior, a la idea de que tu destino es ser el malo de la película, y que tu trabajo es hacer crecer al héroe... Y si ese fue tu propósito, para hacer crecer a alguien que veías como tú mismo pero con el camino bueno, te digo ahora que una pelea no lo hará crecer.
   -Quieres que le haga entender por qué lo hacía, ¿Verdad?
   -Tú mismo lo has dicho. Esa es la forma para que todos podamos seguir adelante, que él entienda tus motivos, que tú puedas ver tus errores. Así funciona el ciclo. Y si de verdad crees que George es como tú, solo que no sufrió lo que tú sufriste, que la misma historia tomó distintos caminos; quizás decírselo no le traerá lástima, sino entendimiento.
   -¿Quieres que me disculpe?
   -Eso es lo mínimo. Y lo harás porque yo te lo ordeno. Pero si quieres que la gente tome sinceramente tus disculpas, hazlo de la buena manera. Hazles entender que no solo eres un villano, que sigues siendo una buena persona, y un dragón al cual respetar. Muéstrales la verdadera persona que eres, no la que tú crees que ellos ven.
   Haireaki sonrió, con esperanza. Era raro, inexplicable para alguien que siempre estuvo en el otro lado. Y sabía que terminaría siendo el villano otra vez, que hacer el bien para él era algo más subjetivo que solo decirlo. Pero era el momento de intentar cambiar, de ser mejor.
   Al final, iba a ser un Gran Sabio dentro de poco. Debía ser respetado, tal como su senpai y los otros, tal como Mako Tachibana.
   -¿Puedo hacerte una pregunta?-Le dijo, mientras Shigeo se sentaba junto al escritorio, quien asintió volviendo su atención al chico-¿Estás decepcionado de mí?
   -Para nada-Dijo con una sonrisa, con felicidad-Estoy contento de esta... ruptura en tu interior. Cambiar es difícil, el primer paso es difícil. Saber qué cambiar es algo que pocos tienen la suerte de encontrar. Quizás tu disculpa no sirva de nada, que todos sigan su vida sin poder darte una oportunidad, y eso también estará bien. Tú diste el primer paso, y debes darlo siempre, nunca pensar que no lo tomarán. La oferta está ahí, ya es parte de la gente si la toma o no.
   -...Gracias.
   -Para eso estoy, por eso soy tu senpai. Yo entiendo perfectamente que todo esto ya lo estabas pensando, pero mi trabajo es hacerte ver la luz, el camino.
   -Y lo hiciste, por eso estoy agradecido.
***