Querido,
Mi corazón no se resigna, lo admito. Es que aunque duela, te tengo corriendo por mis venas y ya no hay quien te pare. Jamás podré alcanzarte y aún así, te escribo tristes cartas, que seguro acabarás por leer tarde.
Querido,
Mi corazón no se resigna, lo admito. Es que aunque duela, te tengo corriendo por mis venas y ya no hay quien te pare. Jamás podré alcanzarte y aún así, te escribo tristes cartas, que seguro acabarás por leer tarde.
Kylian Craig tiene claras dos cosas: enamorarse debilita y todo se puede negociar, así que cuando se da cuenta de que una de sus más grandes inversiones corre riesgo, furioso, decide hacer algo al re...