Está todo oscuro, siempre lo ha estado, el cielo negro y el suelo aún más. Un planeta perfectamente esférico, como una gota de la más pura obsidiana, fría y lisa. Por lo tanto, eso soy, la Oscuridad. El plan ya esta en marcha y mi marioneta, Legna, no podrá detenerme. Pero aun así decido darle un poco de poder, jugar con la gente es divertido.