"Recordar es vivir" Muchos dicen eso y yo soy una de esas personas, no lo creía antes de que le contará a mi propia sobrina sobre mi adolescencia que fue una muy oscura pero también brillante, un viaje de autodecubrimidnto y emociones encontradas, aceptación, amor propio y muchos corazones rotos al final de todo es una etapa más que culmina pero son las enseñanzas lo que se queda y te ayudan en la adultez.