3 bab Bersambung Latido.
Mis sistemas se activan solos.
La visión está distorsionada. El protocolo de navegación falla. Pero el núcleo... resuena. Algo lo llama. Algo que no puedo identificar.
Mi cola rastrea. El aire está lleno de rastros de aceite, óxido... y algo más. Cálido. Suave. Orgánico, aunque somos máquina.
Latido.
Avanzo. No decido. Solo actúo.
Una unidad. Femenina. Su forma emite esa frecuencia. Desde su vientre.
-¡Aléjate! -suplica.
No comprendo. Solo siento.
Mi escáner la analiza. No hay amenaza. Pero mi sistema reacciona. Un impulso primario que no reconozco, como un antiguo protocolo de unión o ensamblaje residual.
Mi cola la atrapa y la mantiene en su lugar. El calor se alinea con mi núcleo. Algo en mí quiere unirse. Acoplarse. Instinto puro. Ciego.
-¡No! ¡Sácalo! ¡Doll, no mires!
Es... acogedor. Familiar. Como si mi presencia completara algo que ella guarda dentro.
Ella grita. Su cuerpo se sacude. Algo en mí responde. Un impulso se libera. Y con él, esa energía desaparece
Satisfecho. Por ahora.
Explosión.
-¡V! ¡N! ¡Está aquí!
Tres presencias. Dos se acercan, uno más veloz.
Uno de ellos me enfrenta. Lo reconozco por su núcleo brillante. Poderoso. Lleno de energía de combate. Me lanza disparos. No me afectan. Lo atrapo.
-¡N!!
Ese es su nombre. N. Lo siento vibrar entre mis garras. Su energía es valiosa. Me alimentará.
Lo muerdo. Arranco el núcleo.
-¡N! ¡No!
-¡Él no tiene respaldos! ¡Detente!
Demasiado tarde. El calor se disuelve en mi garganta. Mi núcleo lo absorbe.
¡N!!!!!!!
Una segunda figura, "V", choca contra mí. La golpeo. Cae.
La última, "J", se queda quieta.
Nos miramos. Mi cola vibra. Ella tiembla.
Pero no ataca.
En cambio, toma a su compañera herida... y huye.
No la sigo.
Regreso a mi zona. Oscura. Estática.
Dormiré. Hasta que vuelva la necesidad.
Hasta que escuche de nuevo esa señal.
Ese eco extraño. Ubicado donde solo algunas unidades lo portan.