No quiero que Dios me cuide a donde sea que vaya, ni quiero que se entrometa con mis colillas de cigarro, las camas sucias en las que duermo y mi rendimiento sexual. Que se joda con su paraíso, yo me quiero quedar con mis pecados.
No quiero que Dios me cuide a donde sea que vaya, ni quiero que se entrometa con mis colillas de cigarro, las camas sucias en las que duermo y mi rendimiento sexual. Que se joda con su paraíso, yo me quiero quedar con mis pecados.
Meredith desde que tiene uso de razón, conoce la existencia de Darek Steiner, aunque ha estipulado una regla bien marcada en su vida: NO ACERCARSE A DAREK.
Darek, por su parte, no tiene idea de quié...