Me enamoré de ti, encanto ||| «EREN X ARMIN FANFIC» ||| {SNK}

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Prólogo: "Un antes y un después''

[20 de Junio de 2008 a las 15:43 horas]

~Narrado desde el punto de vista de Armin~

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Mientras el cielo azul comenzaba a tornarse de un vacío color gris, me encontraba en el parque que quedaba cerca de mi casa, sentado sobre una banca blanca mientras leía un libro prestado de la biblioteca pública de la ciudad.

Estaba leyendo la obra "El Alquimista" de Paulo Coelho, cuando de pronto unas gotas de agua se hacían presentes sobre mi alrededor, fue en ese momento cuando opté por guardar el libro dentro de la mochila que llevaba conmigo, me levanté y comencé a encaminarme hasta mi casa.

Uno normalmente se preguntaría: "¿Cómo es que ese niño de 12 años pueda ir caminando tan solo? ". Eso es porque desde muy pequeño, mi abuelo siempre me traía hasta este parque caminando, y me llevaba a caminar en los alrededores de Shinagawa, uno de los 23 barrios especiales que conformaban Tokio y no era tan complicado saberse las calles.

"Deben de tener cuidado, últimamente hay gente mala rondando por la ciudad."

Recordé aquellas palabras del noticiero en la mañana antes de mi último día de clases, y a pesar de eso, no estaba seguro de querer volver a casa.

Hace una hora que salí de mi casa tras haber discutido con mis padres, ya que les pedía permiso para poder asistir a un festival público mañana en el que me encontraría a mis amigos de la primaria, debido a que era mi último año y ya cada quien iría a partes diferentes de Japón a estudiar, así que era una buena oportunidad para pasar el tiempo que pueda junto a ellos.

"-Eres muy joven como para andar solo a eventos como esos en los que hay mucha gente."

Patrañas.

No era más que excusas para no poder irlos a ver, mi madre nunca estuvo de acuerdo con que tuviera amigos tan volátiles y algo problemáticos como ellos, pero estaba seguro de que ellos me querían como tal y que estarían ahí para mí en todo momento.

Físicamente no soy el más fuerte ni el más ágil, papá piensa que al juntarme con ellos me meterían en problemas y afectarían mi salud.

Y puede ser que mis padres también temían de que mis amigos fueran los causantes de que tuviera "diferentes gustos".

Me detuve frente a la perilla de la puerta que daba paso a mi casa, saqué las llaves de mi bolsillo trasero del pantalón y proseguí a meter la llave dentro de la ranura, al tratar de girarla noté que estaba trabada y no podía abrir la puerta, cosa que me extrañó demasiado y decidí tocar fuertemente la puerta.

-¡Mamá, ya llegué!-llamé a la puerta, sin dejar de pulsar el timbre a un costado de la entrada.

Esperé a que se presentara alguna respuesta de mi madre, saqué un pequeño teléfono Nokia que traía conmigo y marqué el teléfono de mi casa.

-No contestan.-hablé para mí, y lo mismo dije al marcar los teléfonos de mi padre y mi madre sin obtener respuesta alguna.

El miedo comenzó a sucumbir en mi interior, quise darme la idea de que mi madre estaba muy dormida como para atender la puerta.

Por favor, responde.

Marqué ahora al teléfono de mi abuelo, para poder avisarle sobre la situación y si podría ofrecerme una mano con esto.