XXXV-2

17.5K 944 113
                                    

Capítulo treinta y cinco - parte 2

Pov Jexi

Elián reparte caricias por mi mejilla mientras su pulgar delinea mis labios, abro mis piernas lentamente para que él se posicione entre ellas y le doy una mirada juguetona —Hazlo —susurro y sonrío coqueta, su dedo se detiene en medio de mis labios y lo chupo hasta dejar un beso en la base —Soy tuya.

—No sabes como me acabas de prender con eso —muerde sus labios.

—Es solo para que veas lo inocente que puedo llegar a ser para mi Alpha —pestañeo rápido y por sus ojos pasa un destello verde que me hace encogerme llena de deseo por dentro.

Sin previo aviso empieza a recorrer mis pechos con frenesí y arqueo mi espalda a más no poder brindandole mejor acceso a ellos y lo sensibles que están.

Separa su boca cálida de mi pecho haciendo un sonido sordo exitante y me toma de las caderas bajando a su vez mi ropa interior con sus  habilidosas manos.

Un momento, ¿desde cuándo desapareció mi pantalón aquí?

Nuestras miradas con deseo se conectan y la respiración de ambos se vuelve más inestable debido a la burbuja de excitación en la que nos encontramos.

A la mierda el pantalón.

Sus manos siguen bajando mis bragas y al llegar a la parte inferior de mis muslos se queda atascado debido al poco espacio que tenemos. Gruñe y baja una de sus manos por un costado del asiento para hacer que la silla corra más, pero está ya está en su tope.

—Lo siento Julieta, pero... —no termina la frase cuando solo escucho el sonido de mis panties siendo rasgados y hecho girones por Elián.

—¿Pero qué... — me calla lanzándose a mi boca como un loco hambriento y a su vez libera con su mano disponible su grande y gruesa erección.

Me observa —iremos despacio, Julieta — asiento no muy convencida mientras veo el tamaño de eso allá abajo.

Subo la vista a sus ojos cuando escucho el abrir del sobre y él se levanta ligeramente para colocarlo con ambas manos, termina de bajarlo dejando la base al descubierto y lo suelta dejándome verlo por fin en toda su gloria.

Trago grueso y Elián nota mi nerviosismo, porque rápido se abalanza contra mí dejándome sentir lo duro que está contra mi coño.

—¿Asustada?

Niego recobrando la exitación al hacer que mis caderas se muevan de un lado a otro sintiéndolo —No. —gimo cerrando los ojos.

¿Estoy a punto de hacerlo con el acosador?

—No, —dice de repente y observo esos ojos azules dilatados —no vas a hacerlo con el acosador, —se coloca en mi entrada y muerdo mis labios —lo estás haciendo con tú romeo acosador.

Y con esto comienza a entrar suavemente mientras me llena por completo. Cierro los ojos al sentirme invadida y me quejo en voz alta sin importarme quien pueda escucharnos, Elián llega hasta lo más profundo de mí y pongo una mano en su abdomen bajo para que no siga empujando más, sus labios húmedos dejan un beso en mi frente y rápido baja a mis labios temblorosos.

—Shhh, —va dejando un recorrido de besos por mi mandíbula —ya pasará —muerde el lóbulo de mi oreja y baja hasta mi cuello justo donde iría su marca, juega en esa zona con su lengua como un experto mandando oleadas de placer a mi sexo y sin más muevo mis caderas concediéndole el permiso para que se mueva.

Gruñe »—Tranquila Jex, espero que te acostumbres a mi tamaño primero, porque después no voy a poder parar por más que me lo pidas — sigue con su ataque bajando a mis pechos y una de sus manos se posiciona en mi zona sensible ya bien lubricada.

Sus dedos comienzan a repartir caricias en esa zona y rápido todo mi cuerpo se calienta haciendo que pierda todos los pensamientos de mi cabeza y solo estemos él y yo en el mundo.

Sus caderas se mueven poco a poco y gimo como una desquiciada a quien le gustaría tener más de él. Abro los ojos observando los suyos y como sus mechones de cabellos negros resaltan cayendo por su frente volviéndolo la persona más sexy que he visto en toda mi vida.

No Jex, no. Debe ser la exita...

—Elián, —digo su nombre en voz alta cuando aumenta el ritmo de sus embestidas y aferro mis manos a sus brazos —mmmgh.

Sonríe mientras respira agitado sabiendo lo que está causando en mí —¿Elián qué, uh? —dice con voz gruesa erizando mi piel.

De repente él ya no se mueve para nada provocandome y yo comienzo a hacerlo por si sola buscando mi propio placer que es acompañado por el suyo.

Lo atraigo para que este totalmente pegado a mí y pueda impulsarme mejor de sus hombros mientras su miembro entra y sale de mi interior, roto mis caderas en un movimiento circular y esto parece gustarle, porque empieza a moverse rápido.

Su longitud, grosor y calidez se sienten tan excitantes conforme me embiste y mi cuerpo tiembla de la nada con una sensación totalmente extraña que se va formando por el calor que estoy acumulando en mi parte baja.

Llevo mis manos de sus hombros hasta su cabello y lo separo para mirar esos ojos azules hipnotizantes, bajo a sus labios entreabiertos y lo atraigo chocando los suyos con los míos mientras nuestras lenguas juegan intentando tener la victoria uno del otro.

Rápido mis piernas se tensan y arqueo la espalda, esa extraña sensación baja a mi intimidad volviéndome totalmente sensible al Elián seguir penetrandome con fuerza y gimo en voz alta —Mmmgh, Elián.

—Jex, ahhh —gruñe fuerte —que apretada estás.

Siento como su miembro crece dentro y con cada estocada hace un sonido sordo y exitante que me hace temblar más las piernas con la deliciosa sensación palpitante en todo mi caliente cuerpo, da la última estocada fuerte y posa ambas manos a los costados de mi rostro sobre el asiento mientras cierra sus ojos con fuerza y respira agitadamente al igual que yo.

Su mirada se topa con la mía al abrir los ojos y traga grueso antes de sonreír en gran manera, con cuidado sale de mi interior dejándome un gran vacío entre las piernas y me agarra de la cintura con un solo brazo para dar la vuelta y quedar arriba de él.

Ambos nos vemos sin poder creer lo que acabamos de hacer y sin previo aviso sus brazos me rodean atrayendome completamente a él —Al fin eres mía, bebé.

Mi corazón da un brinco en su lugar al escuchar tales palabras y nos separo ligeramente sintiendo una de las más grandes alegrías de mi vida —Al fin me perteneces, chico Dhall —pienso, pero no lo digo y busco sus labios para dejar un suave beso.

Sonrío internamente.

Aunque el romeo acosador tiene razón.

Al fin soy suya.











































...

Nota de autora:—

Dije que no tendrían detalles, pero aquí se los dejo 7w7

Por cierto, debo agradecer a LissettePalacios6 ✨❤️ que fue la que me ayudó con este capítulo!
Si quieren pueden ir a su perfil y tiene 2 obras que son buenas y el contenido es 7w7 zukulento ✨ ustedes me entienden xD

Bueno, me voi uwu/
Nos leemos en la otra novela.

SGLOUD

El Chico Dhall © [+18]Where stories live. Discover now