Actividad de mortifagos

Capitulo único

Harry estaba divirtiéndose... muy, muy divertido.

Se había escapado de Privet Drive tan sólo una semana después de volver de Hogwarts. Fue sencillo, la única persona vigilando era la vieja Figg... Y ella siempre estaba distraída con sus gatos.

Llegó a la guarida del Señor Oscuro, se encontraba usando la Mansión Riddle como sede... Y esperaban su llegada, porque ni bien entró ya lo estaban guiando a la oficina de Tom.

- Oh, bienvenido a mi humilde morada, querido Harry ¿Te han dado un buen trato? - fue el recibimiento de Voldemort, acompañado de una pequeña sonrisa

- Sabes que fue así, Tommy ¿Qué me dices tú? ¿Algún mortifago demasiado idiota con el que quieras lidiar? - respondió Harry

- Ah, por ahora no, amor. Me temo que han sido... lo suficiente competentes esta semana.

-lamentable- siseó Harry y se sentó sobre el Señor Oscuro, reclamando los labios del mismo y luego simplemente descansando en un abrazo.

Y así pasaron los días, con Harry siendo meloso con el Señor Oscuro y Tom dejándose amar por el más joven, tenía los labios más rojos estos días que en todos sus años de vida juntos.

Unos 3 días después, ambos estaban sentados en el sillón frente a la chimenea cuando llegó una carta.

Querido Harry,

Harry, mi muchacho, me encuentro profundamente preocupado por tí. Me he enterado de que no te encuentras en tu casa en Privet Drive, estoy seguro que tus tíos están igual de preocupados que yo.

Vuelve, Harry, no creo que a tus padres o a Sirius les hubiese gustado que dejaras la seguridad de la  casa de tus tíos. Ciertamente no puedo creer que te hayas escapado, Voldemort ha estado haciendo redadas todas las semanas desde hace meses, podrían encontrarte y no quiero ni imaginarme las consecuencias, mi muchacho. Espero verte en Privet Drive en las próximas semanas.

Sinceramente tuyo, 

Albus Percival Wulfric Bryan Dumbledore

Brujo Jefe del Wizengamot.

Hechicero Supremo de la CIM.

Harry se rió.

Histericamente, como si fuera lo último que pudiese hacer. Miró a Tom y sonrió sádicamente, para después canturrear ¨Tommy-boy, adivina qué¨

Tom lo miró secamente, como si quisiera que desapareciera o algo así, pero luego notó la firma de la carta y se acercó a una velocidad que alguien de su edad no debería tener según el  99,8% de los médicos. Le arrebató la carta de las manos de y la quemó después de leerla con una burla grabada en la cara.

¨Entonces estás teniendo redadas cada semana, querido? Cuándo son? Cuando me duermo después del sexo de la tarde o cuando dormimos juntos por la noche?¨ Después sonrió ¨ah, cierto... No puedes caminar correctamente después de la tarde, realmente dudo que puedas mandar a un montón de inútiles para matar gente¨ terminó arrogantemente Harry con una sonrisa terrorífica.

Tom lo miró mal, como cualquiera en su posición haría, pero luego se rió un poco y respondió ¨Hago redadas después de las folladas en la ducha, querido¨ y eso le valió una sonrisa perversa de su esposo ¨Porque obviamente tengo tiempo entre eso y hacer papeleo e investigación¨

Harry, también conocido como Evans Peverell por los mortífagos (y mis lectores) , solo pudo reir como hiena mientras Thomas se burlaba de Dumbledore y su estupidez.

Sólo unos momentos después, tocaron la puerta y, una vez conseguido permiso, entró un mortífago con la que parecía una montaña de papeleo y gritando ¨Lo conseguí, mi señor! Ya sé que propuesta de ley presentar que pondría en desventaja a la vieja cabra¨

Después de todo, que no hubiese redadas no significa que no hubiese actividad de mortífagos... O fiestas de té y galletas, para el caso. Después de todo, Evans Peverell piensa que engordar y llenar de grasa a todos a tu alrededor es una buena forma de verte majestuoso. 

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

- Sin ánimos de ofensa, si eres una persona gordita déjame decirte que ser delgado está sobrevalorado y, mientras no afecte tu salud de manera drástica o tu felicidad, puedes ser tan gordo como desees. Cuídense! 

Ev Peverell - Riddle fuera! Gracias por leer