Dolor y Tormento© - Trilogía: Dos Palabras - Libro #2 - En Pausa

Capitulo 02: Nuevo Jefe

Ximena.

~09/04/2021~

Nueva semana y nuevos pequeños casos que necesitan resolverse y archivarse. Dejo a un lado la carpeta del que doy por terminado y me dejo car en la silla, estirándome.

El chillido de las bisagras de la puerta me hace dirigir la mirada hacia el lugar y Ana aparece con una mueca de pereza.

—Pidieron a todos que bajaran —avisa y me levanto de la silla, tomando mi arma.

Una vez llegamos, todos están esperando a que mi papá, como alto rango, siempre presente en la comisaria, hable.

—Buenas tardes —acomoda el micrófono —. En primer lugar, gracias a todos por venir. Hoy hace unos minutos me llego una notificación por parte de la comisaria de Seattle, en donde me avisaban quien será temporalmente el nuevo teniente, hasta que a alguien se le sea asignado el puesto de manera oficial.

Hace una pausa para beber agua.

—Anteriormente, él ya ha estado con nosotros —añade —, sin embargo, fue trasladado hace unos meses a Seattle, lugar en donde sigue trabajando como detective —mira a un costado y asiente —. Por favor démosle la bienvenida al teniente Jacob Allen.

La mayoría aplaude, incluida Ana.

—Por Dios —susurro.

—Lo mismo digo nena.

Papá me mira desde la tarima y su rostro es de "aplaude, por favor", así que lo hago.

—Gracias —habla nuestro nuevo jefe. Había olvidado su voz —. Me siento feliz de poder volver, aún puedo ver rostros conocidos, cosa que me hace sentir en casa —ojea un momento a todos los que lo observan —. Solamente tengo una cosa por decir —se acomoda la corbata —. Ya la mayoría sabe cómo trabajo —me observa y frunzo el ceño —. Mientras las cosas estén en orden y todo bien redactado, con cada detalle perfecto, no habrá problemas. Gracias, pueden volver a sus labores.

Habla con mi padre por unos minutos y luego, con su secretaria al lado, camina hasta su nueva oficina.

—No puedo creer que esté devuelta. Todos los de la comisaria se le irán encima como hormigas a un terrón de azúcar —comenta con diversión.

—Comenzando por su secretaria —digo, notando como ella pasa su mano por su antebrazo.

—Será divertido ver el drama que se armara —ríe y acomoda su ropa.

—Iré a ver a Roberto, se ve estresado —peina su cabello ondulado.

—No necesito saberlo —ella sonríe socarrona y se aleja.

Subo de regreso y antes de cerrar la puerta de mi oficina una de las secretarias de la comisaria me llama y detiene la puerta.

—El teniente solicita que vaya a su oficina —el poco aire que tenía en los pulmones se le va diciendo eso.

—¿No gustas agua? —inquiero viendo que está roja.

—No detective, gracias. Solo necesito respirar —le agradezco y bajo en dirección a donde debo ir.

La secretaria me da una mirada algo molesta y enseguida me dice que puedo pasar.

—No han pasado ni dos minutos y ya empiezas a hacer mi día de cuadritos. Tengo trabajo que hacer, Jacob.