𝘓𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘪𝘨𝘯𝘪𝘧𝘪𝘤𝘢 𝘴𝘦𝘳 𝘵𝘶́ /Ran y tú/ Tokyo revengers

𝘖𝘯𝘦♫︎

Keiko sano, la segunda hija mayor de aquella familia. Una chica  alegré y simpática, aún después de la muerte de su hermano mayor, prometió cuidar y mostrarles el lado positivo de la vida a sus hermanos, aún si fuera difícil, lo hará.

Un día cómo cualquier otro, los rayos de luz abrazaban con calidez a la Fémina pelirubia, para así dar cuenta que ya había amanecido y que debía ir a la escuela.

se levantó con pesadez, era lo que más odiaba, tener que dejar su cálida y cómoda cama para tener que ir aquel lugar Llamado "escuela", era una tortura.

Se dirigió a darse un baño rápido, por las mañanas el agua era lo que menos le gustaba, tan fría como el polo sur pero era una obligación, después de aquel semibaño. se vistió con el uniforme de la escuela para bajar y ver a sus hermanos desayunado.

-- buenos días.- dijo en un bostezó.

--Keiko, ya deberías irte ya a la escuela, es tarde - dijo la hermana pelirubia llamada emma.

--Ella está aprendiendo de mí- dijo con orgullo el hermano menor llamado manjiro o Mikey.

--Shh, dejen de hablar los dos, Mikey, es hora de irnos ya- mencionó para así tomar su mochila y parase en la salida.

Negó con la cabeza.

-- Me iré con kenchin, tú ve- comentó mientras comía un Yakisoba, ella asintió para terminar de salir de aquella puerta.

El camino era tranquilo, rara vez era así pero no sé quejaba, la Fémina miraba sus pasos con felicidad, contando cada unos de ellos. Parecía una niña pequeña pero le daba igual, una niña pequeña que a sus hermanos le dan miedo perder, era la única que llenaba de alegría su hogar, era algo realmente lindo.

Cuándo miro al frente, ya estaba en su perspectiva escuela, su sonrisa se desvaneció a una de aburrimiento.

Comenzó a caminar dentro de está cuándo vió que muchas personas estaba reunidas en un solo lugar, ¿Parecía una pelea?.

decidió ir a echarle un vistazo, cuándo vió era dos chicos golpeando a 3  solos, uno tenía dos trenzas de cada lado y el otro anteojos con un extraño color de cabello. La Fémina le desagrado la escena así que decidió irse de allí, no era Problema suyo y no quería que ver con nada que se tratara de pelear o de pandillas.

Realmente no quería hablar con nadie, aquella Fémina solo se dirigió a su salón y sentarse en su silla, parecía que sus amigas no iban a venir. Que más da, Almenos sería un día tranquilo para ella

Las horas trascurieron y ya era hora de almorzar.

Keiko se levantó para ir a la cafetería, la verdad no iba a comer nada, solo quería cambiar de sitio y de asiento, y así fue.

Oía a las personas hablar de cosas triviales, ya quería irse de allí pero parece que su pequeño hermano apareció, almenos eso le alegraba.

--Oh, Keiko!, Con qué aquí estabas- dijo con emoción Mikey.

--Keiko, un gusto verte- mencionó el más alto, el mejor amigo de Mikey, Draken

---lo mismo digo, vieron el lío de esta mañana?.

-- lío?, Kenchin y yo apenas llegamos ahora-- la verdad ya era costumbre que Mikey llegará más tarde que otros, que se podía decir de el?, Solo vive la vida.

La Fémina volteó la cabeza hacia otra dirección, y ahí estaban de nuevo, que hacían ellos aquí?.

Nunca los había visto en esta escuela..

-- ¡Hey!, No son esos los hermanos haitani?- mencionó alguien de la multitud.

¿Hermanos haitani?

Continuará...

No, está no será la típica historia donde ustedes siempre tiene curiosidad por todo y van al peligro, serán más de evitarlo cómo cualquier persona normal, nos vemos!