╰─►⸙͎𝙊𝙣𝙚 𝙢𝙤𝙧𝙚 𝙩𝙞𝙢𝙚. [Minsung] ©

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Tocaron su puerta por sexta vez en la semana, la señora que le alquilaba el cuarto a Minho venía a cobrarle la renta.

— Mierda. — Minho alistó rápidamente sus cosas y bajo por las escaleras de emergencia para no tener que hablar con la señora.

Mientras tanto Jisung, Félix y Bangchan estaban alistando sus instrumentos musicales para tocar.

Minho tenía una banda conformada por su novio Jisung que era el tecladista, Félix mejor amigo de Jisung que era el guitarrista y Bangchan que era el baterista.

Minho entro apresurado al pequeño local donde ellos tocaban aunque su banda no recaudaba el dinero suficiente para que Minho pagará sus deudas.

El sueño de Minho era ser un gran cantante millonario y dejar de vivir en la pobreza.

Y Jisung, pues Jisung solo soñaba con que Minho cumpliera sus sueños.

— Empezemos. — Dijo Minho alzando el micrófono.

Jisung sonrió y asintió, después de unos minutos la banda empezó a tocar, la mayoría de canciones eran compuestas por Jisung y Félix.

Minho ya cansado de tocar salió del local siendo perseguido por Jisung.

— Honnie, ¿Todo bien? — Dijo agarrandolo del brazo.

— No Jisung, nada está bien, ya estoy harta de tocar en una maldita banda mediocre, estoy cansado. — Se soltó bruscamente del agarre de Jisung.

— Honnie, pronto lograrás cumplir tus sueños calmate. — Jisung acarició las mejillas del pelinegro pero este solo se fue dejando a un Jisung triste.

¿Como es que se habían conocido?

4 años atrás:

Minho y sus amigos estaban tocando afuera de una secundaria, Jisung pasaba por ahí como todos los días, el se sentaba en las escaleras que estaban al frente de la banda.

Minho lo vio y le guiño el ojo, Jisung sonrió tímidamente y empezó a escuchar atentamente las canciones de la banda.

Jisung no tuvo una infancia feliz, sus padres habían fallecido cuando el tenía tan solo 9 años, dejándolo solo y el solo tenía a su abuela que lo cuido hasta los 15 porque tristemente ella también falleció, todos en la secundaria le hacían bullying diciéndole, "El chico de la mala suerte", "Eres de mala suerte por eso estás solo", "Vete de aquí, no queremos que nos des mala suerte" y eso no era todo, Jisung tenía un pequeño tumor en la cabeza que le fue detectado cuando tenía 17, aunque lo podía controlar con pastillas el no tenía ganas de vivir realmente, no tenía nada ni nadie al cual aferrarse ni un motivo por el cual seguir viviendo, su vida era solitaria, hasta el día en el que se detuvo para escuchar a aquella banda afuera de su escuela.

Lo vio a Minho, le pareció un persona alegre y vio en esos ojos cafés una chispa.

Cuando Minho y su banda termino de cantar, Jisung se paró y siguió caminando para tomar el autobús pero fue detenido por Minho.

— ¿Si? — Jisung tenía las mejillas levemente sonrojadas.

— Hola, ¿Te gustó nuestra música? — Le mostró una sonrisa.

— Si, me pareció linda y relajante, tu voz es linda.

— Es perfecto, mmm, ¿No quieres escuchar otra canción?

— Yo tengo que ir a casa y ya está atardeciendo así que..

— Porfavor déjame dedicarte una canción y me dices tú opinión, si quieres puedo llevarte a casa.

¿Debería confiar en aquel extraño sujeto con una voz dulce?

— Mmmmm, está bien...

— No te arrepentirás. — Dijo el pelinegro feliz y se dirigió a su banda.

Después de esa canción y de que Minho lo acompañará a su casa, después de unos días eso se convirtió en salidas, risas y juegos.

Lentamente Jisung se fue enamorando de la personalidad tan alegre de Minho y Minho también se enamoró del solitario Jisung.

Finalmente después de unas semanas de salidas y de conocerse mejor, Minho le propuso ser su novio y Jisung acepto muy feliz.

Alfin tendría un motivo para vivir, una persona a la cual aferrarse.

Ahora en el presente, Minho ya no sentia mucho amor hacia Jisung, ya no lo amaba como antes.

Minho estaba bajo la lluvia caminando después de dejar a Jisung parado afuera del local totalmente triste.

— Hey, ¿Tu eres Minho? — Le pregunto una señorita muy bien vestida sosteniendo un paraguas afuera de su departamento.

— Si y si viene del banco a cobrarme, pues solo le diré que no tengo dinero.

— No soy del banco, tú enviaste una solicitud porque quieres entrar a nuestra empresa, ¿Quieres ser cantante solista cierto?

Minho palideció, su oportunidad había llegado después de tanto tiempo.

— Si, ayer mandé una canción compuesta por mi.

— Bien, me complace decirte que mi empresa está interesada en ti y tu voz, mañana en la mañana ve a la empresa para conversar mejor sobre el tema.

— Si, si así será no se preocupe, gracias, muchas gracias. — Minho hizo miles de reverencias.

— Bien, adiós. — La señorita se fue en un taxi.

Mañana la vida de Minho daría un giro tremendo.