Capítulo 11

25 10 2
                                    

Feliz año nuevo alitas!!
Favor de leer hasta el final ya que hago un aviso importante

11._ Descubrimientos y entrenamiento.

Tayden

Aquella mañana me desperté con energía, tomé un desayuno y regresé a mi habitación a cambiarme de ropa y contar mis monedas. Sólo me quedaban 20 pryams, debía buscar un trabajo pronto.

Salí de la posada y caminé en dirección al castillo más grande e imponente que he visto en toda mi vida, el cual se alzaba sobre una colina, haciéndolo ver más grande. Al llegar, en las puertas estaban un par de guardias de trajes azules que era el color que se usaba aquí, ambos eran altos y de piel clara, tenían el cabello blanco y los ojos azules, eran exactamente idénticos excepto porque uno tenía pecas sobre la nariz y los pómulos y el otro no.

—¿A qué has venido? Habla o piérdete —dijo uno de ellos.

—Yo... he venido a ver al rey.

—¿Para qué? —preguntó el otro.

—Necesito hablar con él, es un asunto importante.

—¿El rey sabe que vienes? —parecía que se turnaban para hablar, primero uno y luego el otro.

—No.

—Entonces piérdete, tienes que avisar antes de venir.

—El rey me recibirá, estoy seguro, cuando sepa quién soy lo hará. —Ambos estallaron en carcajadas.

—¿Has oído eso Camelum? —dijo el pecoso aún riéndose —. ¿Y quién se supone que eres, el hermano pequeño de Bylur?

Y se rieron más ¿ven a lo que me refiero cuando digo que eso deje de pasar? Es frustratnte.

—Mi nombre es Tayden, soy el hijo de sir Martimus. —Inmediatamente dejaron de reír, era la primera vez en muchos años que mencionaba el nombre de mi padre. Esperaba que me dejaran entrar, pero en vez de eso, ambos me miraron con una expresión dura y de rabia profunda.

—Escucha bien muchacho. —Uno de ellos me tomó por el cuello de la ropa y me alzó —. El hijo de Sir Martimus está muerto, así que mejor vete antes de que te envíe al más profundo calabozo por usurpar su nombre.

Con una fuerza bestial, me arrojó varios metros y caí de espalda al suelo, ambos volvieron a su posición en la puerta, parándose firmes.

¿Yo, muerto?

Vaya, ¿y a qué horas fue eso que yo no me enteré?

Yo no podía estar muerto, quiero decir, no lo estoy, estoy aquí parado y estoy bastante seguro que en este reino no había otro caballero famoso con el nombre de mi padre. Caminé de nuevo hacía los guardias gemelos.

—Me llamo Tayden, he venido desde Camalot a ver al rey, ¡así que déjenme pasar! ¡Yo soy el hijo de Sir Martimus! —Uno de ellos acercó su rostro al mío de manera amenazante.

—Pruebalo.

Eso no lo había pensado, ¿cómo rayos iba a probar que era hijo de mi padre si no tenía nada? Lo único que tenía era mi parecido con él, y sin embargo ellos no parecían notarlo.

—Eso pensé —dijo ante mi silencio.

—Ahora vete.

—¡Que no me voy! He venido desde muy lejos a ver al rey y eso haré —intenté correr hasta la puerta, pero ambos me detuvieron, me empujaron y caí sentado.

¿Cómo tenían tanta fuerza? No parecían muy mayores que yo, y no tenían tanta musculatura.

¿Te rindes ya?

Los pasadizos del castillo [COMPLETADA]Where stories live. Discover now