Cap 18.-

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Nicolás

Un par de años atrás le pregunté a mi madre ¿En qué punto sabré si estoy enamorado?, aun recuerdo la mirada de mi madre de confusión, me observo por un momento y me sonrió para solo decirme que el único que podría saber seria yo, no había un momento fijo o marcado para poder decir que amabas a alguien, simplemente se daría el momento y ese día estaría seguro de mis sentimientos hacia una persona.

Las palabras de mi madre venían una y otra vez a mi cabeza al escuchar el arma detonarse, Alexia corrió hacia mi y la abracé fuertemente, la policía llegó al lugar segundos después pero Ivan se había ido, así que los uniformados fueron tras el.
Me quede abrazándola unos segundos, hasta que ella despegó su cabeza de mi hombro, me miró fijamente con los ojos llenos de lagrimas si decir ni una palabra.

— El no se volverá a acercar a ti... te lo prometo— bajo la mirada para ver una de sus manos que estaba empapada en sangre.

— Nicolás...

—No...— la tome fuertemente para impedir que cayera al piso— Vas a estar bien... te lo prometo— hice presión en la herida de su espalda , lágrimas comenzaron a salir de mis ojos, mi garganta se convirtió en un nudo rápidamente.

—Yo...

— No hables por ahora — saque mi teléfono de mi bolsillo para llamar a una ambulancia y para mi sorpresa la pantalla estaba completamente destruida—¡Ayuda! Por favor— comencé a gritar, personas comenzaron a acercarse y rápidamente comenzaron a llamar a urgencias.

— Nicolás...— tocó mi mejilla y me sonrió — te amo...— me observo un par de segundos más, mientras con su pulgar limpiaba las lágrimas que caían por mis mejillas— tengo sueño... — me susurró.

— No puedes dormirte ahora, ya viene la ambulancia en camino... tienes que ser fuerte.— ella asintió con su cabeza y se esforzaba por mantener los ojos abiertos, aun que estaba perdiendo mucha sangre.

—Oye...— me sonrió— si quiero... — la mire confundido y ella comenzó a llorar — si quiero casarme contigo...— susurro, haciendo que mi alma se rompiera en mil pedazos.

—Perfecto, nos casaremos en cuanto te recuperes— trate de sonar calmado ante esta situación, la ambulancia no llegaba y los segundos se hacían cada vez más largos — Será algo familiar, ¿Estas de acuerdo? — ella asintió — Cris será el padrino, lo obligaré a usar traje y corbata— sonrió un poco al escuchar eso— tu padre me matará cuando sepa que te pedí matrimonio... Alexia... abre los ojos recuerda que no puedes dormir ahora... cariño... por favor ¡Despierta! no me dejes solo — llegaron los paramédicos y me apartaron de ella hicieron RCP para tratar de que su corazón volviera a latir y después de un millón de intentos lo lograron, la subieron a la ambulancia rápidamente. Los paramédicos hacían lo que podían para que ella pudiera llegar estable al hospital.

—¿Que fue lo qué pasó? — preguntó uno de los paramédicos.

— Herida con arma de fuego en la columna con posible daño en médula espinal, pulmón colapsado y paró cardiorrespiratorio.

— ¿Usted es doctor? — me quede en silencio observándola en la camilla.

Llegamos al hospital y fue directo a cirugía, pedí que llamaran a sus padres desde el hospital pero tardarían en llegar por que no se encontraban en la ciudad, me senté en la sala de espera, cada hora que pasaba parecía una eternidad, los doctores salían a dar noticias a otras personas y yo era el único que no sabía nada.

—¿Usted es familiar de la paciente Gómez?

—Si— me levante rápidamente del sillón— ¿Puedo pasar a verla? ¿Está estable? — el doctor puso su mano sobre mi hombro y solo negó.

—Ella no soportó la cirugía, perdió demasiada sangre, hicimos lo que estuvo en nuestras manos...— mi mundo se comenzó a derrumbar en ese momento, deje de escuchar la voz del doctor y comencé a caminar por el hospital hasta llegar al quirófano donde aún se encontraba ella, me acerqué a la camilla y caí de rodillas frente a ella en ese momento quería gritar, quería destruir todo, quería matar con mis propias manos al maldito que le acababa de arrebatar la vida, me levante del suelo y abrace su cuerpo inmóvil

—¿Que voy a hacer ahora? — acaricie su mejilla — ¡¿Por que tu?!... Yo tendría que estar en tu lugar... — me recargue en su pecho y llore, hasta que no pude más, hasta que mis ojos ya no daban para más lágrimas, levante la mirada y la observé unos minutos más, acaricié su rostro y bese su frente — te juro que lo encontrare y lo are pagar por todo lo que hizo... Te amo y siempre te amare... se que nos volveremos a encontrar, tal vez este no fue nuestro tiempo ni la vida correcta... te amo— bese sus labios que ya estaban fríos, siendo ese el ultimo beso que nos dimos.







Hoy no puedo preguntarles si les gusto el capituló por que creo que lo odiaran, igual es el capítulo más personal en esta historia, me recordó mucho a la muerte de mi mamá.
No me odien 😭 ya llore al escribirlo hagan de cuenta que lloro con ustedes.
Si ven algo mal escrito no usen en corregirme se los agradezco mucho.
Y aun no es el final 😏

El último besoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora