===Capítulo 15: Un día de estudio en el Sanctum Sanctorum===

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===Capítulo 15: Un día de estudio en el Sanctum Sanctorum===

Al día siguiente después de que Ancient One le mostrara la dimensión espejo a Midoriya. Esta estaba supervisando un combate de dos alumnos, mientras que Midoriya la observaba.

Midoriya: ¿Que tan anciana es ella? — Cuestiono a Mordo el cual estaba de rodillas acomodándose unas botas.

Mordo: Nadie conoce la edad de la hechicera suprema. Solo que es celta y nunca habla de su pasado — Comento caminando alrededor del peliverde.

Midoriya: ¿Tú la sigues sin conocerla? — Cuestiono.

Mordo: Yo sé que es firme pre impredecible. Despeada, pero amable. Ella me ayudo a ser lo que soy — Comenta para después ponerse en guardia seguido del peliverde — Confia en tu guía...y no dejes el camino.

Midoriya: ¿Igual que Kaecilus?

Mordo: Así es — Comenta para después darle una patada que Midoriya logro esquivar.

Rápidamente el peliverde empuja a Mordo con todas sus fuerzas con ambas manos, logrando hacerle una llave.

Midoriya: Lo conocías — Mordo se libró del agarre del peliverde y ahora era el quien tenía el control sobre el chico.

Mordo: Cuando el llego...había perdido todo lo que amaba. Era un hombre destrozado buscando respuestas en las artes místicas. Un estudiante valiente, pero era orgulloso, testarudo — A la mente del peliverde vino su amigo, aquel pelicenizo que abusaba de el por no tener un don — Desafiaba a Ancient One, rechazaba sus enseñanzas — Midoriya le dio un codazo a Mordo, logrando liberarse del agarre.

Mordo: Abandono Kamar-Taj. Sus discípulos lo siguieron ciegamente. Seducidos por una falsa doctrina.

Midoriya: Y robo un ritual prohibido ¿no?

Mordo: Si.

Midoriya: ¿Qué hace el ritual?

Mordo: No más preguntas — Comenta tomando un bastón.

Midoriya: ¿Qué es eso?

Mordo: Eso es una pregunta — Comenta señalándolo con aquel palo que tenía en su mano — Esto es una reliquia. Hay magia muy fuerte como para soportarla...entonces la ponemos en cosas...para que absorban la tensión que no soportamos. Este es el bastón...del Tribunal Viviente — Aquel bastón se extendió reflejando partes amarillas que desprendieron chispas del mismo color, Mordo lo golpe en el suelo como si de un látigo se tratase — Hay muchas reliquias. La varita Mágica de Watoomb. Las Botas de Volteo de Valtorr — Comenta dándose un pequeño golpe con su pie al otro.

Midoriya: Son fáciles de decir, ¿no? ¿Cuándo obtengo mi reliquia?

Mordo: Cuando estés listo — Responde.

Midoriya: Lo estoy Mordo.

Mordo: Estarás listo cuando la reliquia decida que lo estas. Por ahora...conjura un arma.

Midoriya: Bien — El peliverde haciendo caso a lo que dijo Mordo junta un poco sus manos, seguido de esto el espacio que había entre estas saco pequeñas chispas anaranjadas, para después transformarse en líneas que se conectaron con sus dedos de ambas manos.

Mordo sin previo aviso empieza atacar con aquel baston, a la arma que se extendia de las manos de Midoriya, como pudo el peliverde se defendia de los ataques.

Mordo: ¡Pelea! Pelea como si tu vida dependiera de ello — Comenta siguiendo con sus ataques, haciendo que Midoriya se defendiera con dificultad.

Deku el nuevo Hechicero SupremoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora