Gatita...¿?

otro encuentro inevitable...

Con sus manos alrededor de mi cintura y sus labios destrozando los míos llegamos a la puerta y pego mi espalda a ella; y con su mano derecha giro la perilla sin perder el ritmo de sus besos al entrar dio un giro conmigo y empujo la puerta con su pie para cerrarla continuo besándome y bajo sus manos y las puso en mi trasero para sujetarme fuerte tropezamos con la mesa puse mis manos alrededor de su cuello hizo que abriera mis piernas, él se puso en medio d ellas y me levanto para subirme ala mesase recostó encima de mi empezó a desabotonar mi camisa y tomo con sus dientes mi brasiel por la parte de en medio de mis senos y lo tiro hacia atrás apretó de lado a lado mi cintura con sus manos beso mi boca, mi cintura ,mi mandíbula, mi tráquea, beso cada una de mis vértebras cervicales, mis hombros, mi clavícula, mis senos, mi esternón, cada una de mis costillas beso, mi estómago, mi ombligo, el lunar que está cerca de el, mi abdomen, mis muslos, mis rodillas, beso mis piernas por completo, las plantas de mis pies (jejeje..Sentí cosquillas), me puso boca abajo con su mano retiro de mi cuello mi cabello, beso mis manos mi espalda mi columna vertebral, beso vertebra por vertebra, mis nalgas, fue tanta su picardía que mordió una de ellas, beso mi cintura mi corazón estaba a mil, mi respiración entrecortada, y tenía unos temblores en toda la piel, tomo una de mis manos y le puso una esposa y la pego a la cabecera de la cama me dio una vuelta y que de frente a él, me pareció divertido pedirle que me pasar la lengua por donde quisiera así que mordió mis labios y de un solo brinco bajo a mi sexo puso una mano en cada una de mis piernas las abrió y metió su lengua dentro de mi sexo cada lamida era suave y cada vez aumentaba el ritmo y metía más a fondo su lengua en mí, con mi mano derecha tome su cabeza y comencé a masajearlo, involuntaria mente mis piernas se abrieron y se posaron alrededor de su cuello, sus manos apretaban duro y soltaban continuamente mis senos como dándoles masajes, al cabo de unos minutos metió sus dedos dentro de mí, y luego los llevo a mi boca para darme a conocer mi sabor se montó sobre mí con mi mano derecha que era la que tenía libre sujete su trasero y el me pidió que maullara así que maullé (mmmiiiaaauuu....) roso su sexo en mi boca le pase la lengua y con mi mano derecha lo sujete para chupar de la punta estaba tan sedienta que me bebí toda la leche que salió de aquel según yo mi tetero y aun así no estaba satisfecha así que lo mordí para ver si lo podía escurrir y estallo mojando mi boca, mi rostro, mi cuello, y mis senos, tenía tan duros los pezones que el los mordió como si fueran dos fresas; bajó un poco hasta rozar su sexo con el mío sin adentrarlo lo rozaba hasta que no soporte y le pedí que me lo metiera hasta el fondo dijo que: rogara y lo haría el solo jugaba con el cascabel que había en mi cuello mientras le pedía que me lo metiera todo, se levantó un poco acaricio mi cabello y las orejas de gato que tenía puestas y lo empujo tan fuerte que corto por completo mi respiración y unas pequeñas lagrimillas de satisfacción salieron de mis ojos, él me decía que maullara y maullé tan fuerte que algunos inquilinos del lugar se despertaron, él me dijo que todo estaría bien así que confié, me beso para opacar un poco los gritos y los maullidos mientras las personas volvían a dormir decidió soltarme la mano izquierda, para recostarme en sus piernas boca abajo para nalguearme tan fuerte que sus huellas dactilares quedaron marcadas en mi piel luego de tan arduo trabajo de acostó en su cama y me recostó a su pecho sin dejar de observarme su mano derecha estaba en mi espalda y la izquierda acariciaba de arriba abajo desde mi hombro hasta mi trasero, hasta quedar dormidos, en la mañana me levanto a besos y me trajo el desayuno a la cama después de desayunar juntos nos fuimos a bañar y el me llevo al baño sujeta de la cadenilla que tenía en mi collar con el cascabel me pareció sexy y divertido ponerme en cuatro y empezar a caminar hacia el baño como si fuera su mascota el solo sonrió y empezó a decir: gatita, gatita, gatita... ven gatita, ven por aquí, ven mi gatita, me llevo a la regadera la abrió y el agua tibia empezó a caer en mi espalda y el me dio una "mano" se arrodillo a enjabonarme pero cuando puso su mano en mis senos no pude quedarme quieta así que le mordí una tetilla estando arrodillada igual que él me toco toda y me beso tanto que el contorno de sus dulces labios quedo en cada poro de mi piel y en mi alma como prueba de aquel acto loco, apasionado y desenfrenado que se apodero de estos dos amantes nocturnos hasta llevarlos a la plena luz del día donde tienen que volver a ocultar sus demonios y esperar hasta la fría noche para ser desatados y poseídos por las manos del deseo, de la lujuria, de un loco, salvaje y apasionado amor que los envuelve cada que anochece...