I don't wanna be your friend

🍯⊰❞ ɪ ᴡᴀɴɴᴀ ᴋɪꜱꜱ ʏᴏᴜʀ ʟɪᴘꜱ

Izuku observa el trozo de chuleta de cerdo que sostiene con sus palillos con una expresión en blanco, tan absorto en sus pensamientos que ni siquiera se da cuenta de las miradas preocupadas de sus amigos, y ni siquiera está murmurando, lo cual es más preocupante.

-Eh, Deku, ¿pasa algo? - Uraraka es quien se anima a preguntar, tocando sus suavemente el hombro del chico para que no se asuste.

-Kacchan está actuando raro. - Susurra Izuku, mientras que, en su mente se repiten las escenas de las últimas semanas, en las que su amigo de la infancia lo había estado tratando de manera más gentil, tal vez demasiado amable, lo cual le hacía preocuparse.

Katsuki nunca se había ofrecido a hacerle de cenar, tampoco a lavar los platos que usaba, ni le ponía mantas calientitas cuando se quedaba dormido o le daba regalos como golosinas, mucho menos material coleccionable de All Might, tampoco era usual que fuera a su habitación a dejarle chocolate caliente y sándwiches.

¿Y si Kacchan estaba enfermo? ¿Se había golpeado la cabeza? ¿Qué tal que era algún infiltrado de la liga de villanos haciéndose pasar por Kacchan y el verdadero Kacchan estaba secuestrado de nuevo?. Se preguntaba con angustia.

-¿Uh? Tal vez solo se siente mal por haberte tratado antes, deberías de hablar con el Deku. - Uraraka le da unas pequeñas palmadas en la espalda a su amigo, haciéndole notar de paso que había vuelto a murmurar.

Izuku cubrió sus labios con sus manos, sonrojándose hasta el nacimiento del vello. Luego suspiró, dejando salir todos esos malos pensamientos que habían carcomido su mente durante los últimos días.

- Deberías de hablar con él, Midoriya. De esa forma podrán dejar de lado malos entendidos que pueden dañar de nuevo la amistad que tienen. - Habla Iida con un tono firme pero acogedor, como un hermano mayor que se preocupa por su pequeño hermanito y hace sentir a Izuku más tranquilo.

-Iida tiene razón, además, ¿no hay cosa que no puedan superar, verdad? - Dice Uraraka con una expresión cálida en su rostro, jurando las palmas de sus manos con una actitud tranquila. Sabe que los chicos de alguna manera de la arreglan para ser un buen duo, siendo algo casi natural en ellos al conocerse desde que eran pequeños.

-No entiendo por qué se complican tanto si se gustan. - Habla Shoto por primera vez, mirándolos curioso sin leer el ambiente correctamente, antes de seguir comiendo con tranquilidad su soba. A veces puede ser muy denso en cuanto a relaciones sociales, pero es que desde su perspectiva, la cercanía que muestran ambos y la manera en la que se miran o el ambiente que se crea cuando están en una misma habitación, es similar al mismo tipo de escenas que ve su hermana mayor en las películas románticas, de esas escenas cliché en donde los protagonistas se profesan amor.

Izuku se levanta, exaltado con las mejillas ruborizadas y el corazón galopando contra su esternón.

-¡No, Kacchan y yo no...!

-¿Que yo qué, nerd?- Katsuki toca el hombro de Izuku, en sus manos lleva la bandeja de comida vacía a excepción de un flan dulce y una lechita de vainilla, las cuales deja en la mesa, aún lado de la bandeja de Izuku.

-¡Kacchan! No es nada, es solo que estábamos hablando y yo, bueno, ellos, es que, yo...

-Tsk, cállate Deku. Si no lo comes, te mato. - Katsuki señala el postre que ha dejado sobre la mesa de Izuku, antes de retirarse, haciendo caso omiso a los tartamudeos incomprensibles del chico pecoso. Nadie nota el leve temblor en sus manos o cómo las mejillas del rubio comienzan a tornarse rojizas.

Izuku se queda quieto en su lugar, sus ojos esmeralda brillan de júbilo mientras observa al rubio alejarse. Entonces de sienta de nuevo, tan callado como cuando inició su conversación, pero está vez, hay algo cálido extendiéndose por su pecho, adormeciendo sus sentidos, provocando que sus mejillas salpicadas con lindas pecas se pongan rositas.