𝑬𝒍 𝑶𝒓𝒇𝒂𝒏𝒂𝒕𝒐᯾Rodrivan᯾

𝐂𝐚𝐩 1-✰𝑬𝒍 𝒏𝒖𝒆𝒗𝒐 𝑵𝒊𝒏̃𝒐

9 de Octubre de 2007
Cumpleaños de Rodrigo

"Nunca me han dado un regalo de cumpleaños, ¿será el nuevo niño un regalo?"

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Era la madrugada del 9 de octubre, casi las 3 de la mañana, pero esto a Rodrigo no le importó, tenía las suficientes ganas de ir al baño cómo para levantarse e ir. Le suele dar miedo ir solo, por eso muchas veces este ha terminado haciéndose encima, pero hoy no, ya tiene que demostrar que es un niño grande que puede ir solo.

Rodrigo no aguantaba más, se levantó rápidamente de su cama y fue silenciosamente al baño, no quería despertar a ninguno de sus compañeros y mucho menos a una de las madres.

El baño se encontraba lejos de su habitación, así que decidió aumentar la velocidad del paso, no podía aguantar más.

Llegó a la puerta del baño, éste la abrió rápidamente y encendió la luz lo más rápido que pudo, lo que más le da miedo al pequeño es la oscuridad, el orfanato de noche daba más miedo de lo que debería.

Logró hacer pipí, se lavó las manitas y ya le tocaba devolverse a su habitación, en este momento es cuándo el pequeño tiene más miedo, saber que tiene que caminar en silencio por esos oscuros pasillos hasta su habitación le da escalofríos, es tan tétrico de noche.

El pequeño apagó la luz, cerró la puerta con mucho cuidado, volteo a ver al pasillo, eso le dió escalofríos, era tan oscuro y silencioso que lo hacía temblar.

Decidió empezar a caminar, entre esos oscuros pasillos. El orfanato había sido construido hace mucho tiempo, por lo que no era raro que cada ciertos pasos se escuche el rechinar de la madera ya vieja.

Ese sonido aterraba al pequeño Rodrigo, pues más que darle miedo la oscuridad, le daba miedo que alguna de las madres se despertara y lo castigara.

Mientras iba caminando, escucho unas voces que venían de la oficina de la directora y eso lo asustó, creía que ya lo habían descubierto e iba a empezar a correr, hasta que escuchó algo que llamó mucho su atención.

-El pequeño no ha sonreído ni una sola vez desde que llegó, estoy muy preocupada por el.

-Su tía me dijo que éste ha sufrido muchas cosas, por lo que me ha contado, es normal la rara forma en la que se comporta el pequeño.

-No sabría cómo ayudarlo, ¿crees que podamos hacer algo?

-Mmm.. No creo, su tía me dijo que el pequeño no ha sonreído desde que vió a su mamá... Ya sabes.. Debe haber sido muy duró para el vivir algo así.

-Tienes razón, espero se pueda adaptar a éste lugar, el habría preferido quedarse con su tía, lástima que no tiene una estabilidad económica estable para cuidarlo.

-Voy a ir a ver si los niños ya están todos dormidos, se han visto casos en los que pasean por los pasillos -sonido de pasos-

Rodrigo caminó lo más rápido que pudo hasta la habitación, estaba cerca así que no tenía que preocuparse.

Se subió a su cama y se hizo el dormido, justo a tiempo. La madre abrió la puerta y caminó entre las camas, viendo a cada uno de los niños dormir, después de escucharse los pasos cada vez más lejos, se escuchó la puerta cerrarse y Rodrigo pudo volver a respirar con normalidad, el pequeño solía agitarse al escuchar los pasos de las madres, era algo aterrador.

Aunque Rodrigo haya pasado por muchas cosas, el pequeño era muy alegre y amaba compartir su alegría con los demás.

Por eso le alarmó tanto escuchar sobré la llegada de un nuevo niño que no sonreía -¿Estará triste?- pensó, la inocencia de Rodrigo no le permitía entender que el pequeño había perdido a su madre, por lo que no entendía el porqué de su tristeza -Yo lo ayudaré a sonreír- Rodrigo es muy terco, por lo que nada va a hacer que cambié su decisión.

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