Capítulo 8. La segunda luna llena

12 5 0
                                    

Habían pasado 30 días, 710 horas, 17, 040 minutos y 1,022,400 segundos desde que había salido del Descanso y vuelto a la consciencia

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Habían pasado 30 días, 710 horas, 17, 040 minutos y 1,022,400 segundos desde que había salido del Descanso y vuelto a la consciencia.

Había marcado cada salida y regreso del sol... porque cada día que pasaba significaba más de una cosa poco agradable:

1. Que era otro día en donde no encontraba rastro de la existencia de la comunidad sobrenatural y ya no me atrevía a tocar los libros de vampiros escritos por humanos por miedo a incrementar mis traumas.

2. Que era otro día sin hallar un sustituto efectivo de la sangre que no fuese médula de res (en serio empezaba a odiarlo).

3. Que era otro día donde debía trabajar como humano y partirme el lomo cargando cajas.

4. Que era otro día donde tampoco hallaba pista del medallón y no podía volverme rico vendiendo un artefacto que no sabía lo que podía hacer.

Aunque, si lo veía desde un punto positivo (que me había obligado a mirar en vista de que nada mejoraba), tenía:

1. Que era otro día donde al menos nadie se había enterado de mi verdadera naturaleza y no me habían mandado a quemar por ser una criatura no humana.

2. Todavía no lo pensaba.

En conclusión, odiaba cómo se habían torcido las cosas.

Les daré un rápido resumen de lo sucedido los últimos 27 días: Había logrado adaptarme a la actualidad como si hubiera nacido en este siglo; me había mudado y conseguido un apartamento (bueno, Alka lo consiguió, pero yo pagaba la renta); me compré un celular con mis ahorros (que eran más de los que podría tener un humano con mi sueldo, pues no gastaba en comida y me ahorraba mucho en eso); y avancé mucho con mi plan de dominación mundial.

Eso último no es exageración, por si se preguntan.

Había estado recopilando muchas pistas sobre la comunidad sobrenatural y lo ocurrido con el medallón de oro que me robaron y, aunque todavía no hallaba algo concreto, me sentía decidido a encontrarlos y empezar desde lo más bajo a lo más alto como había hecho en el pasado.

Iba a recuperar mi ostentoso puesto de líder y armar de vuelta mi clan.

—Orion, deja de divagar y ve a caja para suplantar a Andy —llamó Sussie con gesto cansino y ojos rojos (me había dicho que eso era por el cansancio, aunque a estas alturas yo sospechaba otra cosa)—. Siempre estás con la cabeza en las nubes... si sigues así, no vas a conseguir el ascenso que quieres.

Ah, sí, yo estaba buscando un ascenso, porque eso implicaba un aumento... Y necesitaba más dinero para empezar a expandir mis conocimientos de este siglo, puesto que había tenido un encuentro con un montón de frikis de vampiros en internet y había sigo algo como:

Yo: ¿Dónde puedo conseguir libros de vampiros?

Desconocido: ¿Crepúsculo?

Yo: NO

Las Trágicas Aventuras de Orion y Alka © [COMPLETA]Where stories live. Discover now