Hola chicos, ¿como están? Yo bien por si se lo preguntan
Si que me desaparecí un huevo de tiempo pero acá estoy.
Pero bueno, les presento esta nueva historia creada por mi
Aún así; yo renuncio a los derechos de los personajes que salgan en esta historia, le pertenecen a su respectivo creador.
Yo solamente soy el que crea la historia de ambos personajes. Sin más que decir
Puchale play
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Tanta gente en el gran pais Nipon, de aqui para allá haciendo sus cosas, pero centremonos en un pequeño departamento ubicado en un edificio de 3 pisos en el centro de una de las ciudades de este mismo país
Dentro de este apartamento, siendo precisos en una habitación había un bulto el cual se encontraba moviéndose de un lado para otro, el ¿por qué?
Era porque una alarma que estaba en una repisa al lado de la cama no paraba de sonar, por lo que para poder callarla o directamente ignorarla se tapaba los oídos y giraba.
Pasando un minuto se hartó, aún con pereza estira su brazo y golpeó con fuerza a aquel despertador, cosa que provocó que dejara de emitir ese sonido tan molesto
-Ahg... otro día de mierda...-
Dijo la voz que provenía de aquel bulto de la cama
Con movimientos lentos a causa de la pereza la persona dentro de las cobijas empieza a retirarlas, tomó lo suyo pero ya sin cobijas que taparan se mostró de quien era la voz de hace rato.
Era una hermosa chica de pelo corto el cual le llegaba a los hombros, de un hermoso color negro azulado, con un fleco el cual cubria un poco su frente. Con una piel blanca como la nieve y muy bien cuidada, con unos hermosos ojos azules, pero como si fuera poco ella posee un cuerpo con muy buenas curvas y bien cuidado.
Simplemente una belleza, le mires por donde le mires
Tallandose los ojos y sentandoce en el borde de su cama ella da un largo bostezo
-Bueno a empezar este día de mierda... con la mejor actitud... Yeii-
Con una mirada que no reflejaba sentimientos se levantó de ahí, fue en busca de su ropa, pues al acabar de despertar tenía que bañarse. No le gustaba estar sucia. Aunque también tenía unas vendas las cuales igual se llevó al baño.
Metiéndose al baño obviamente se limpio completamente, ahora ella está en una pequeña bañera.
-"Es fin de semana... ahh tengo que ir al trabajo, vamos Ishimi Yokoyama tú puedes aguantar otro día mas "-
Pensó ella al mismo tiempo que se sumergía en el agua de la bañera
Al terminar de secarse todo el cuerpo tomó las vendas que anteriormente tomó
Usando las vendas las ajustó a su pecho haciendo que este reduciera, vendarlos si que servía teniendo en cuenta que ella no le gustaba que la mirasen de manera asquerosa.
Salió del baño y fue a su cocina para tomar algo de comer; algo sencillo que era una manzana y un plátano. Se los comió con total normalidad sin ninguna interrupción pues ella vivía sola en aquel apartamento.
