1

11.4K 1.1K 235
                                    

1: Es malo, quema.

Es estúpido aveces escuchar a los adultos, ellos también fueron jóvenes y alguna vez pensaron lo mismo que yo.

"Esto estúpido."

Mi madre siempre me dijo que habían cosas buenas y malas en el mundo, las podía reconocer muy bien, incluso se las podía señalar ahora mismo. Pero señalar es malo dicen. Y mi madre también me lo recalca.

Y hoy es de esos días donde se rompían un par de reglas y yo me confundía si debía seguir las reglas o también debía romperlas.

Caminando fuera de la escuela junto a mi madre que había venido a hablar con el director y que será obvio que mañana seré recibido amigablemente por él ya que ella donó al establecimiento. Aunque no es el punto, mientras caminábamos hacia su auto, un KIA bien cuidado gris, frente a el habían en unos metros se encontraban unos chicos de mi escuela, lo supe por el uniforme, y mientras miraba sus ropas desordenadas, sus camisas fuera de los pantalones, mangas arremangadas hasta los codos, miré a mi madre preocupado por lo que haría y soltando una exclamación mientras su rostro cambia a uno pálido y de desagrado, supe inmediatamente que vendría continuación.

Viendo que dos de los chicos estaban fumando, me sobresalto cuando notan nuestras miradas y aun así se mantienen indiferentes a nosotros.

ㅡDelincuente.ㅡ dice mi madre desbloqueando el auto.

También me sorprendo de sus palabras. La miro asustado cuando un chico se percata y su rostro se arruga en molestia al parecer haber escuchado lo que ella dijo, intentando dar un paso hacía nosotros, es detenido por el chico que había inhalado el cigarro y su cabello azabache algo largo que rompía una las tantas reglas de la institución, mira sus amigos y luego a mi madre.

ㅡCuide su auto señora. ㅡ con una sonrisa burlesca responde, lo miro preocupado, había entendido esa amenaza y cuando su mirada choca con la mía trago saliva. Era ruda y fría y yo podía notar que lo decía enserio ㅡPuedo ser el delincuente como dice.

ㅡSube al auto Taehyung. ㅡ parpadeando varias veces, miro a mi madre y a los chicos algo perturbado.

Acato la orden de mi madre de inmediato y me subo al auto en la parte del copiloto, sin evitar mirar el espejo retrovisor y observar a los chicos reír de algo que yo no encuentro gracioso, me siento nervioso mientras aquel pelinegro seguía ahí, mirando atentamente el auto, o más bien seguía mirándome desde el espejo.

Él.

Jeon Jungkook.

Todos lo conocen por su mala fama y sin un padre que lo reconozca, todos basados en rumores, como el que también su madre es una prostituta y quedó embarazada y uno de aquellos hombres era el padre de él.

Cuando una vez pregunté por él, a mi madre casi se le salen los ojos, ella simplemente miro a mi padre que con una mueca respondió: "No te metas en eso Taehyung, eso es malo, y lo malo te llevará al infierno."

Y había algo que la iglesia siempre enseñó o yo entendía que era lo correcto, y eso era el no juzgar. Y lamentablemente es lo que hacemos en esta familia y eso es lo que me perturbaba.

Y a pesar de darme cuenta, no digo nada y eso me hacía sentir que era igual que ella. Aunque he tenido mis discusiones por ello, yo debía seguir manteniendo mi perfil de hijo perfecto y así será siempre.

No estoy en contra de los paradigmas que me han enseñado mis padres y la religión, digo, me gusta la iglesia, aunque suele ser aburrido a veces y debo ser sincero. Aunque sabía que lo que estos chicos estaban haciendo no era bueno, el dejarse caer en los vicios es algo que yo tengo entendido que es malo y siempre he tenido un fuerte conocimiento de ello. Por algún motivo, tampoco yo sentía el derecho de recriminar a alguien...como mi madre lo estuvo haciendo.

ㅡ¿Cómo nadie siente el olor a cigarrillos? ㅡ mi madre manejando ya por la calle principal, habla con tono agudo y suspiro mirando por la ventana. ㅡDeberían suspender a esos chicos de una vez por todas.

ㅡConozco a uno de ellos y es bastante inteligente...

ㅡSi lo fuera debería saber que eso le está matando.

No hablo más. Parte tenía razón mi madre, porque yo también lo pensaba.

Y lo malo de todos los vicios... Es que cuando piensas que tú tienes el control, el manipulado eres tú. Y puedes verlo claramente en esos hombres durmiendo en plazas aferrados a su botella de vino o ron o lo que sea que satisfaga ese hambriento vicio me lo dejaba claro.

ㅡOdio las escuelas públicas. ㅡ ella susurra y no digo nada en el transcurso.

Seguimos el recorrido para ir a casa en silencio, algo cansado de haber participado en la reunión de mi madre con el director donde claramente ella entrega como buena samaritana una suma de dinero para mejorar el Instituto. No digo nada incluso que gracias a eso, suelo ser el ojo de mis compañeros por ser su preferido en la ecuela.

Es obvio que es un sinvergüenza que recurre al dinero nada más y a mi tampoco me agradaba mucho, pero decirle a mi madre ello sólo llegaríamos a una discusión donde siempre termina ella con la razón.

Me he callado otra vez.

No es sorpresa.

ㅡ¿Mañana irás a la parroquia? ㅡ pregunta.

ㅡSí mamá. Tenemos clases de canto. ㅡ ella lo sabe pero siempre me lo recuerda.

Como hace cinco años cantaba en la iglesia junto a otros chicos, entre ellos Jimin, mi mejor amigo. Me ha fascinado el canto y la música, gracias a participar en la iglesia mis padres me compraron una guitarra donde práctico las canciones de la parroquia y otras veces otro tipo de música o sólo improviso. En mis ratos libres me gusta pasar tiempo en la iglesia cuando no había nadie. Era de esos momentos donde era yo y la música nada más. Sin discurso del padre de por medio.

ㅡ¿Puedo llevarme el auto mañana? ㅡ pregunto a mi mamá y ella asiente con su cabeza.

ㅡClaro, recuerda cuidarlo y manejar con cuidado, confío en ti, pero no en estos conductores alocados.

ㅡSeré atento y no es la primera vez que manejo mamá.

ㅡSólo digo Taehyung.

Le sonrió y cuando llegamos a casa, con una disculpa voy a mi habitación tan rápido dejándome caer en mi cama en cuanto llego a mi lugar de seguridad. Finalmente viernes y aunque debería alegrarme, en poco comenzaré hacer mis deberes para que el fin de semana pueda aprovechar el máximo con la música.

Mirando hacia mi costado izquierdo, me quedo en mis divagaciones al mirar un libro de tapa negra y una cruz dorada en medio de la cobertura, aquel libro del cual mi madre leyó como cuento cuando era pequeño y que siempre estaba en mi velador.

Es realmente impresionante que exista un libro sin ningún tipo de ironía o humor. Podrían llamarlo aburrido, pero la Biblia no es para todo tipo de personas me contó mi madre, no todos entienden su escritura, sólo los eruditos pueden comprender y esos siempre me ha acomplejado, sólo asiento con mi cabeza sin comprender realmente de todo aquellas palabras, ¿no soy lo suficientemente erudito? ¿O es que veo más allá de esas simples fábulas y parábolas?

Cierro los ojos, volviendo a escuchar la amenaza de la tarde... Aquellos ojos negros volviendo a lograr mi cuerpo temblar porque sabía quien era, se sabía su historial de delincuencia, pero lo extraño, y quizás es la misma sensación que sucede con la Biblia, existía una complejidad que quería derribar, un muro que quería derrumbar.

¿Por qué?

⏤͟͟͞͞  JUDAS ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora