i'll hold my breath

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Doyoung nunca pensó que estaría tan agradecido de estar sentado en un asiento del medio en la sección económica de un vuelo, pero seguro que fue mejor que estar amontonado en una van con el resto de la banda mientras atravesaban Norteamerica. No había mucho glamour en ser el acto de apertura de una gira de estadios cuando la mayoría de la audiencia ni siquiera había oído hablar de ellos y ni siquiera se molestaron en aparecer hasta después de que terminó su actuación. Doyoung no podía quejarse. Claro, bromeaba con el resto de los chicos sobre sus circunstancias mientras veían a Suho y a sus compañeros de banda abordar su cómodo y moderno autobús de gira o tomar un gran Escalade negro hasta el aeropuerto más cercano si la próxima parada era más de un día de distancia, pero al final, Doyoung estaba extasiado. Se ganaba la vida como músico. Recorriendo el país. Tocando en lugares enormes.

Estaba viviendo el sueño.

Palmeó su bolsillo izquierdo por centésima vez desde que abordó y Haechan puso los ojos en blanco desde la relativa comodidad del asiento junto a la ventana. Los miembros de su banda estaban felices por él, pero un poco hartos de permitirse la peor de las neurosis de Doyoung. Decidió que iba a proponerle matrimonio a Taeyong en el momento en que salieron de Nueva York. Eso fue hace meses. Era todo de lo que podía hablar.

No es como si tuviera alguna intención de proponer matrimonio pronto. De ninguna manera. Necesitaba mucho tiempo para planear la propuesta más perfecta de todos los tiempos sin el agotamiento y la niebla mental que inducían las giras. Además, seguía trabajando como manager del grupo (¿alguna vez encontraría a alguien más adecuado para la tarea que él?) a pesar de los correos electrónicos desesperados del sello con una lista de recomendaciones de "profesionales reales" para contratar. Estaba demasiado ocupado para idear un plan digno de Taeyong. Entonces, ¿por qué ya compró el anillo? Doyoung era un hombre de gran convicción, una vez que se decidía a hacer algo, lo iba a hacer.

—No se fue a ninguna parte, ¿sabes? —dijo Haechan sin apartar la mirada de la ventana.

Doyoung volvió a su cuerpo— ¿Eh? ¿A qué te refieres?

—El anillo. —dijo Haechan, volteando los ojos otra vez.

—Oh, cierto. Sí. —respondió Doyoung, ya perdido en sus pensamientos nuevamente.

Haechan picó en medio de su frente— Tienes que apagar esa cosa de vez en cuando. Piensas demasiado.

—Bueno —dijo Doyoung, golpeando su mano—, uno de nosotros tiene que hacerlo.

Mark había estado dormido en el asiento del pasillo— ¿Mmm? ¿Aterrizamos?

—Pronto —dijo Haechan, inclinándose desagradablemente sobre el regazo de Doyoung para hablar con Mark—, alguien ha estado pensando de nuevo. —agregó, mirando a Doyoung.

Jungwoo levantó la cabeza de la fila detrás de ellos— ¿Qué esperabas?

—Lamento haberte despertado —le dijo Doyoung a Mark, ignorando a los demás—. Vuelve a dormir.

—Está bien —bostezó Mark—, estoy despierto ahora —dijo, estirando los brazos tanto como el espacio reducido le permitía—. ¿Qué tan emocionado estás de ver a Taeyong otra vez?

El corazón de Doyoung dio un vuelco. Su piel prácticamente zumbaba ante la idea de volver a ver a Taeyong. Fue horrible estar separados por tanto tiempo después de que finalmente resolvieran las cosas. Planearon que Taeyong se encontrara con ellos en el camino varias veces, pero nunca funcionó, por una razón u otra. Al principio, intentaron facetiming o al menos llamarse todos los días, pero les resultó casi imposible coordinar sus agendas atareadas y poco tradicionales. Incluso le dieron una oportunidad real al sexting, pero Doyoung era demasiado consciente de todo eso y rara vez estaban en el entorno adecuado al mismo tiempo.

𝗜'𝗟𝗟 𝗛𝗢𝗟𝗗 𝗠𝗬 𝗕𝗥𝗘𝗔𝗧𝗛 │ DOTAEWhere stories live. Discover now