Crimenes Y Desapariciones

Niño Mimado ( Cyril Jaquet Merino)

Ubicación del crimen: Benijófar, Alicante.

Fecha del crimen: 1 de agosto de 1994

Víctimas: Oliver Jaquet y María Isabel Merino

Historia

En 1984 una familia llegó para instalarse en el pequeño pueblo de Benijófar, Alicante. Oliver Jaquet era suizo y su mujer María Isabel, era española. Tenían solo un hijo, llamado Cyril, que apenas tenía 5 años en ese momento. Oliver Jaquet abrió un restaurante dedicado a las fondues, pero tiempo después decidió cerrarlo y dedicarse a instalar sistemas de calefacción. Mientras Isabel trabajaba como traductora de Francés.

A Oliver le gustaba coleccionar armas, por lo cuál tenía una colección, donde habían armas sin declarar. A medida que Cyril iba creciendo, su rebeldía aumentaba, no hacía caso a los límites que imponían sus padres y además las calificaciones en la escuela no eran buenas. Cyril era un joven al que le gustaba el deporte, por eso en su tiempo libre practicaba judo e iba junto a su padre a pasear con la moto.

Para Cyril los límites impuestos por sus padres, era una forma de castigarlo, ya que él decía no poder ser libre como le hubiese gustado. Sin embargo, un amigo de la familia declaró: " Lo tenían quizás, demasiado consentido " Aún que para él, era todo lo contrario y sentía que lo estaban ahogando.

Crimen

El 1 de agosto de 1994, cuando Cyril tenía 15 años, estaba en su casa, en la finca de los Algarrobos, una vez más, se encontraba enfadado con sus padres, ya que la tarde anterior, había discutido con ambos por no cumplir el horario establecido por sus padres. Así que cogió una de las armas de la colección de su padre, específicamente una Mauser-Wecker del calibre 7,65. Cyril espero a su madre en casa y cuando ella volvió de trabajar, mientras que Isabel, su madre, subía las escaleras para cambiarse de ropa, Cyril abrió fuego contra ella recibiendo dos disparos en el cuello y un tercero, para rematar, en la coronilla. Dejó el cuerpo de su madre ahí tirado y espero a que su padre volviera de su trabajo, para seguir con su plan.

Espero unas cuatro horas junto al cadáver inerte de su madre, hasta que su padre volvió, Cyril nunca contó que hizo durante esas cuatro horas en casa. Cuando su padre, Oliver, entró a la cocina se encontró con Cyril, el cuál sin mediar palabra, abrió fuego en contra de él, recibiendo 7 balazos y remató con un balazo más en la cabeza. Cyril después de cometer el crimen, comenzó a buscar en los cajones, desordenó la casa y cogió algunas joyas y objetos, que mas tarde se deshizo de ellos. Cogió su bici y recorrió unos 9 km hasta la casa de sus abuelos,donde se quedó a dormir.

A la mañana siguiente, Cyril volvió a su casa y cuando entró en ella, comenzó a gritar, salió corriendo y pidiendo ayuda, este se mostraba shockeado cara a los vecinos, para todo el mundo, habían entrado a robar y había acabado en un homicidio. El pequeño pueblo Alicantino se encontraba conmocionado por esta trágica historia, el matrimonio que había perdido la vida, era muy querido por sus vecinos y amigos. Los vecinos se apiadaban del joven adolescente, que había perdido a sus padres durante ese supuesto robo.

Si algo sorprendió a los vecinos, amigos y familiares fue la tranquilidad del joven, con la que enfrentaba ese duro momento, el adolescente no lloraba, a penas se inmutaba. Durante el entierro del matrimonio, algo alerto a la policía y es que el joven, Cyril , no paraba de sonreír, mientras los demás familiares, amigos y vecinos mostraban su dolor por esa pérdida y hasta se dio el gusto de contar algunos chistes.