Capitulo 1

75 4 2
                                    

Sabia que esto era una mala idea.

Lo sabia, lo sabia, y aún así cometí la estupidez de meterme a jugar este tonto juego.

—Uhhh, esto va a ser interesante —escuche que decía la chica a mi lado. —Johana, ¿prenda o... beso?

Estudio las opciones, si eligo prenda tendré que quitarme o mi blusa o mi short y no pienso dejar que todos aquí me vean semidesnuda, pero si eligo beso tendré que besar a... Seth.

El mejor amigo de mi ex.

Y además mi ex también está aquí junto a su nueva novia.

Todos aquí me miran esperando mi respuesta.

Que Seth sea el mejor amigo de mi ex no es la razón por la que no lo besaría, la verdadera razón es que es un insoportable.

He hablado con él muchas veces inecesariamente en mi vida y ha conseguido irritarme mucho, tiene un don para molestarme con sus bromitas, además es egocéntrico.

Estoy casi segura que es de los que  coquetean con todas las chicas incluso si tienen novio, y siempre me molesta.

Entonces, sí, nunca lo besaría.

Pero, sin embargo, tengo unas inmensas ganas de quitarle esa sonrisa de burla de la cara de Jacob y su noviecita Mónica.

Muerdo mi labio sabiendo que posiblemente me arrepentiré de esto.

—Beso.

A mí ex se le borró la sonrisa, creía que yo no sería capaz de besar a otra persona luego de que me haya dejado hace dos meses, y menos frente a él y algunos de sus amigos, que equivocado está.

Esto se llama venganza, imbecil.

Algo llama mi atención en ese momento de satisfacción, Seth se acerca a donde estoy.

Joder, ya me estoy arrepintiendo, en cuanto veo su mirada sobre mí, me levanto para quedar frente a él, aunque soy más baja.

Alza las cejas y sonríe divertido.

—¿Te has arrepentido? —susurra, demasiado cerca para mí gusto—, si quieres puedes irte, al final no pasará nada, solo que todos te dirán que aún no has superado a Jacob, y que...

Tomé su rostro entre mis manos y sin pensarlo lo besé.

Se quedo quieto y sentí que se tensó, cuando al fin me iba a apartar él puso una de sus manos en mi cintura y correspondió el beso.

Nuestros labios se paseaban por los del otro, tanto que no me di cuenta que la idea de besarlo, la cual aborrecía, se había esfumado de mi cabeza, y tampoco me di cuenta en qué momento nuestras lenguas se unieron al beso.

—Hey, chicos, ya pueden parar —dice alguien con tono de voz divertido.

Me separo empujándolo con mis manos, tengo la respiración acelerada y los labios hinchados.

Madre mía, mierda.

Necesito salír de aquí, no sé ni porque me metí en esto.

Obligo a mis piernas a reaccionar, y voy hacia la puerta de la habitación, antes de salir noto que Seth se inclina para decirle algo a Jacob y luego al notar que lo miro, me sonríe divertido.

Abro la puerta y salgo rápidamente, bajo las escaleras y encuentro a mi amiga América en la barra junto a su novio, Rayan.

—¿Pasa algo, Joha? —pregunta América.

—No, nada, ¿por? —aprieto los labios.

Labios.

No puedo pensar en labios sin que recuerde el beso.

—Estás totalmente roja —comenta Rayan—, y estuviste un buen rato desaparecida, estábamos a punto de ir a buscarte, incluso Daniel estaba preocupándose.

—¡Al fin apareció la perdida! —exclama Dani detrás de mí—, ¿has bebido? —frunzo el ceño y niego—, estás con las mejillas rosadas.

—No he bebido, solo hace calor y hay mucha gente —le respondo, luego de creo dos minutos se escucha gritos en el piso de arriba.

Veo como algunas personas bajan y hablan sobre dos chicos que empezaron una pelea.

—Vamos arriba —nos dice Daniel

—¿Para?

—Obvio, para saber quiénes son y por que pelean —eso es suficiente para que los tres lo sigamos.

Chismosos, con razón se llevan tan bien.

Subimos las escaleras  y nos detenemos frente a una habitación con la puerta abierta, hay montones de gente dentro, y entonces al ver a algunas personas ahí me doy cuenta de que esa habitación es donde estaba minutos antes, estaba tan concentrada en escuhar los gritos que no lo había notado.

—Ya no hay pelea —dice América.

—Pero hay gente que están reteniendo a dos chicos, miren, ahí se puede ver quienes son —volteo la mirada hacia la dirección a la que señala Daniel.

Abro la boca cuando reconozco las dos personas que están reteniendo.

Y aunque uno lleva más golpes que el otro puedo reconocerlo perfectamente.

—¿Ese no es Jacob y su mejor amigo? —Rayan se voltea hacia mí, asiento.

—Pues mejor amigo ya no creo que sea —ríe América—, Diría pobre Jacob, pero se merece que le hayan roto la cara.

Veo que mi ex le dice algo que no logro escuhar y Seth intenta que los chicos que lo retiene lo suelten, pero Monserrat —o ese creo que es su nombre, su novia o amiga, ni idea— se le acerca.

—Seth, ya basta, este imbecil no merece la pena —alzo las cejas sorprendida, pensé que ella también era amiga de Jacob.

—¡¿A quién llamas imbecil?! —esa voz es la de Mónica, novia de Jacob— ¡Es mi novio!

—Nadie ha dicho que no lo es, y por favor, no quieres iniciar una pelea.

—Tienes miedo a ser humillada ¿no es así?, sabes que perderías la poca dignidad que tienes —Moserrat ríe.

—¿Perdón? —dice incrédula— tú serías la humillada y tampoco eres la más indicada para hablar de dignidad, digo, fuiste el cuerno, y le hiciste un favor a la chica, por cierto, pero ahora que tú eres su novia el puesto de amante quedó vacante, así que no te sorprendas si muy pronto descubres que está con otra, ahora sí, apártate de mi camino —se voltea hacia Seth—, y tú, sigue, vámonos, que bueno que ya no vives con tus padres.

Salen de la habitación, y noto la mirada de Seth sobre mí, por lo que lo miro y me sorprendo al ver que el único daño visible es que tiene el labio con sangre, y un moreton apenas visible.

—Vamos, vamos —le insiste su amiga, y él sonríe antes de quitar su mirada de mí y caminan hacia las escaleras.

—Creo que necesito contexto —murmura Dani—, ¿no se supone que Jacob y él eran mejores amigos?

—Eso me dijeron —respondo.

—Pero, al parecer eso cambió, ahora la pregunta es; ¿por qué?

Me mira como si yo supiera la respuesta.

Me encojo de hombros.

Pero, creo que sé de un motivo por el que puede haber ocurrido esta pelea, el hecho de que haya besado a Seth le dio en el orgullo a mi ex.

Para él eso fue una ofensa, porque cree que una vez que tiene algo eso es suyo para siempre.

No solo hablo de los objetos, también de las personas, él esperaba que yo no pudiera besar a otro hombre porque piensa que yo le pertenezco a él, cuando nunca lo hice.

Y aunque me arrepienta un poco de haber besado a Seth, admito que estoy contenta de haber herido el orgullo de Jacob.

No te soporto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora