✧ 11 ✧

1.1K 118 17
                                    

﹀﹀﹀﹀

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

﹀﹀﹀﹀ . •    •    •    •    •    •      . ﹀﹀﹀﹀

Unos días pasaron, luego pasaron unas semanas y Roger no apareció en este tiempo. Rayleigh empezó a realmente preocuparse, porque nunca desaparecía por mucho tiempo de su vista, más cuando su capitán prácticamente vivía en el Oro Jackson. E incluso había preguntado al aburrido de Bullet sí se encontraba en su camarote o efectivamente, lo estaba ignorando completamente.

Su corazón se contrajo un poco con este punto, quizás él se había dado cuenta que todo lo que pasaron juntos era sólo un error, que quizá todo lo que sentía era una confusión y nada más que aquello, las ganas de vomitar vinieron todas juntas. Al pensar esto, se sentó en el amplio sillón abrazándose a si mismo. “No, no. Roger no sería así o ¿sí?”.

Él no podía simplemente irse, sus manos empezaron a temblar, sus ojos se cristalizaron, él en verdad lo quería como él otro lo quiere.

La lluvia llegó como sí supieran lo triste que estaba el rubio en aquel momento, las gotas golpeaban con constancia en la ventanilla que daba en su camarote de Rayleigh quien intentó respirar más tranquilamente, pero sólo lo logró de forma entrecortada y con un peso al hacerlo que lo dejó algo más intranquilo.

Pero entonces como sí de un rayo apareciera en el cielo, tocaron su puerta. Pestañeó un par de veces antes de pararse, se quitó sus lentes para limpiar todo rastro de lágrimas que había anteriormente por sus mejillas.

Fué caminando a la entrada mientras se volvía a colocar sus lentillas en los ojos crispados.

Cuando por fin llegó a la puerta, el corazón casi se detiene; abrió rápidamente porque algo lo llamaba.

Al abrir, sus ojos escanearon desde los pies hasta arriba, para ver frente a él finalmente a Roger con tulipanes en una mano y un pequeño osito de peluche entre la otra.

Las expresiones en el rostro de Rayleigh pasaron rápidamente, primero su mentón tembló en señal de llorar, sus ojos volvieron a cristalizarse y ésto alteró a Roger. —Ray, bebé ¿estás bien? —El pelinegro dejó todo en el mueble de zapatos y rápidamente se aproximó a Rayleigh tomando sus mejillas— ¿Ray?

El rubio levantó la mirada con sus cejas fruncidas, el puchero por retenerse a no soltar un quejido al llorar y al ver el rostro de Roger sólo lo hizó enojar más lo golpeó en el pecho. —¡Pedazo —Un golpe— de —Otro golpe— idiota! —Otro más.

Roger se sorprendió, pero lo aceptó. Sabía el porque de seguro su primer oficial se encontraba así por eso, él mismo había decidido ir a disculparse y rogarle que lo aceptara, por él sabía que Rayleigh siempre sería demasiado para él, porque quería darle todo aún así sí estuviera fuera de su alcance y ahora mismo agradecía los golpes que le daba porque se los merecía y mucho más si se pudiera golpear así mismo por haberlo hecho llorar y dudar como de seguro el menor había creído.

Te odio. —La voz nasal de Rayleigh fue oída atentamente mientras era abrazado por su capitán quien asentía a cada regaño del aludido.

Yo te amo, más de lo que puedes imaginar sabes... Sí me tomé todo este tiempo solo sin verte, sin poder tomar tus manos, sin poder sentir tu aroma, sin realmente ver tu rostro, fué porque quería confirmarlo.

Rayleigh dejó de llorar enseguida y escuchó atentamente mientras abrazaba a Roger por el cuello.

Perdón, por no poder decirlo antes, por preocuparte tanto y por hacerte esperar aún más. Porque aún sí en mi otra vida salve a mí país, no creo que me puedan dar un regalo más enorme, que poder tenerte en la mía, porque, por fin entendí muchas cosas a mí alrededor, al no verte. No puedo pensar en verte con otra persona, que no sea yo, porque me descoloca, porque cuando te veo sonreír, creo haber escuchado la melodía más hermosa de la vida y no puedo creer cuánto tiempo me negué a aceptarlo y ser feliz por algo tan idiota como prejuicio por como me mirara la gente o mí tripulación, qué dirían, al diablo con todos, mientras te tenga a ti ¿Por qué debería dudar?

Rayleigh soltó a el pelinegro para que ambos se vieran de frente, sus ojos llenos de ilusiones brillaban como un cielo lleno de estrellas, tomó las manos de un avergonzado Roger y lo miró curioso; necesitaba  que se lo dijera. —Me gustas, Silvers Rayleigh. ¿Podrías salir conmigo?

No se necesito pensar para ninguno más, fué entonces que el espadachín tomó el rostro de su capitán y por fin lo besó con sus sentimientos a flor de piel, con ilusiones y promesas interminables para un futuro con ambos juntos se unieron en un beso, donde Roger pasó sus manos hacía la cintura del rubio y Rayleigh lo sostenía de la nuca, donde la lluvia los acompañaba.

Se separaron sólo por la falta de oxígeno para mirarse una vez más. —Lo tomaré como un si.

Rayleigh rió leve y dejó otro pequeño beso en los labios ajenos. —Es más que obvio que fue un si idiota. —Esta vez Roger rió contagiado por la risa de su ahora novio que dejó realmente embobado al capitán.

—Te amo. —Rayleigh sonrió y unas pequeñas lagrimas corrieron por sus mejillas; el pelinegro le apartó sus lentes con cuidado para secarlas de inmediato. —No llores, por favor.

Roger lo miró preocupado mientras daba leves caricias a sus mejillas. —Es sólo que estoy muy feliz.

No cabía duda de lo que alguna vez le dijo Roger cuando lo conoció; Rayleigh estaba destinado para él.

﹀﹀﹀﹀ . •    •    •    •    •    •      . ﹀﹀﹀﹀

 ﹀﹀﹀﹀

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
ᑎ𝖮 ᕼ𝖮ᗰ𝖮 ✧ 𝖱𝖮𝖦𝖤𝖱 𝖷 𝖱𝖠𝖸𝖫𝖤𝖨𝖦𝖧Where stories live. Discover now