Alas Poéticas

Insano Deseo

Dulce tormento de la oscuridad, en sus brazos tengo la seguridad de que puede llevarme al éxtasis de la locura, y disfrutar de todo sin amargura.

Señor de las tinieblas que me ínsita al pecado, lograste sacar todo ese deseo acumulado, con solo pensar en su destreza, hace que arda cuando me besa.

Contemplar el deseo en su mirada, hace que el deseo me invada, nublado mis sentidos, lo reconozco por lo rápido de mis latidos.

La serenidad que evoca mi alma, a todo mi ser da calma, me delata la forma en que te veo, pero tú eres lo que anhelo.

El dulce e insano fervor, que me hace sentir me da calor, la lascivia y la lujuria que sueltan nuestros cuerpos, es tan armonioso como el sonido de los cuencos.

Mágico y astral es nuestro choque, hace que me desenfoque, disfruto estar entre tus brazos, por que sé que juntos vamos paso a paso.

Nos envuelve un aire confidente, sin tenerlo en cuenta eres parte de mi presente, el secreto del deseo en mi interior, tú lo conoces mejor.

No me enamoro de tu sonrisa, pero tú voz mi piel eriza, cada minuto a tu lado, me hace seguirte como un loco desesperado.

Tú respiración agitada, se acompasa con la mía desesperada, anhelando la colisión de nuestro mundo, que surja el placer desde lo profundo.

El delito que me inspira su piel, hoy lo reconozco solo en él, la extraña manera en que sus caricias envuelven, y las erráticas miradas que me consumen.

Se el dueño de mis sucias palabras, aquellas que no necesitan ser aclaradas, como grandes amantes incendiamos la cama, y eso no nos da mala fama

Adoro el recuerdo de tú voz excitada, pues a mi mente la deja extasiada, atraída a tu oscura belleza, esa que me envuelve con fiereza.

Oscura tentación, sigue llenándome de emoción, cuando se termine el tiempo, recordaremos esto como un buen evento.

Cada vez que nos encontramos, de este fuego nos deleitamos, somos seres pasionales, disfrutando los placeres carnales.

La fragancia de su piel, solo le queda a el, recordar todo lo vivido, es algo que no quiero que quede en el olvido.

El dulce sabor de la pasión, me hace caer en la tentación, tan intensa es su mirada, que me tiene calmada.

Con el corazón acelerado, doy un paso aventurado, viendo todo de colores, ¿Dejaré que mi alma devores?.