𝐅𝐎𝐑𝐁𝐈𝐃𝐃𝐄𝐍 𝐂𝐎𝐔𝐏𝐋𝐄 | Cheng Lu ✓

12

Al día siguiente me desperté al rededor de las 11:00 am me quedo unos minutos viendo mi teléfono e intento recordar lo que haré hoy.

Un rato después voy hacia la sala donde mi padre está viendo la televisión, está acostado en el sillón y parece quedarse dormido.

Se gira a verme y lo saludo, voy a la cocina y saco una manzana. Mientras la como saco un plato y pongo un poco de cereal con leche.

Mientras como mi padre ve la televisión, termine y voy a bañarme, pero mi padre me habla.

—Julie, en un rato iremos al supermercado—asiento y voy a bañarme.

Cómo hoy estaba haciendo frío, trato de bañarme lo más rápido que puedo, cuando salgo me pongo un pantalón negro y otra blusa negra de manga larga, solo que está es un poco más escotada.

Me pongo una sudadera y trato de secar un poco mi cabello con las manos, lo desenredo y voy junto mi padre.

Voy y bajamos para subir al coche. Se encontraba el día freso aparte que llovía levemente.

Cuando llegamos bajamos y tomamos un carrito. El iba haciendo bromas y yo me reía de ellas. Al llegar al primer estante hechamls algunas cosas al carrito, como platos, vasos, cucharas etc.

Después verduras, frutas y algunas carnes rojas.

Fui al pasillo del cereal y agarre el que más me gusta. Que es de colores.

Después fui por la leche deslactosada para regresar con mi padre.

Estaba viendo que espuma de afeitar llevaba por lo que mientras voy a la parte de toallas íntimas.

Después de ir con mi papá vamos a pagar, hablaron algo en chino que entendía muy poco y fuimos al coche.

Metimos todo a la parte de atrás del coche y subimos.

Cantábamos la canción de Feeling good, veo que no vamos en dirección a la casa y le pregunto.

—pa ¿A dónde vamos?—le pregunto y el sin mirarme me dice.

—Vamos a ir a un restaurante a comer—yo asiento y seguimos cantando.

Llegamos y no era un lugar muy elegante, pero para mí gusto era bonito y cómodo.

Yo pedí una hamburguesa sin papas y mi padre una con papas.

Cuando terminamos de comer regresamos a la casa y me lavo los dientes.

Jugamos un rato uno, a esperar que se hagan las 7, a las 6:30 mi padre me lleva a la casa de Meiying pues está algo lejos.

En el camino me habla mi padre.

—Vendre por ti a las 9—asiento y sigue manejando.

Cuando llegó a su casa me da un beso en la frente y se va.

Tocó el timbre y me habré Cheng.

Me ve con cara rara y confundida.

—Vengo con Meiying—le digo a lo que asiente y me deja entrar.

Ahora que veo su casa, es grande, y bonita. Aparte de espaciosa.

Baja y ya está Dre y Harry ahí, oh soy muy impuntual o llegan muy temprano.

Subimos a su habitación y comenzamos con el proyecto,  era algo difícil así que nos tomamos un tiempo. Platicamos un momento y de nuevo comenzamos a hacer el proyecto.

Me empezó a doler la cabeza a lo que voy al baño.

Al subir las escaleras (pues su habitación es en el primer piso) me encuentro a Cheng salir de su habitación y ponerse su sudadera.

Trato de evitarlo y me toma del brazo lastimado. Suelto un pequeño gemido de dolor y me mira confundido.

—¿Porque me estás evitando?—me pregunta a lo que niego.

—No te estoy evitando—me niego y el levanta una ceja.

—Siempre que te peleo te defiendes, ahora solo me evitas—le digo a lo que no se que responderle.

Vuelve a tomar mi brazo y suelto un pequeño grito de dolor.

—¿Que te paso?—me dice mientras suelta mi brazo.

—nada—tartamudeo un poco, intentando no sonar nerviosa.

—Julie, no sabes mentir—me dice y bajo un poco la mirada.

Lentamente siento como hace para aún lado mi blusa y deja destapado un poco más abajo de mi hombro.

—¿Quién te hizo esto?—me pregunta a lo que intento poner una escusa.

—Me pegue en el entrenamiento—le digo y el me mira a los ojos.

—Mientes—este idiota es brujo al parecer—Este es un golpe como los del dojo ¿Alguien de ahí te golpeó?—me pregunta a lo que niego—Vuelves a mentir—toma lentamente mi cintura e intento callar mi dolor.

Cheng ve mi cara y me arrastra a su habitación.

—Quitate la blusa—me ordena a lo que niego.

—No tienes el derecho a ordenarme—me cruzó de brazos y esboza una sonrisa sarcástica.

—Ya te he visto desnuda—me susurra en el oido y se me enchina la piel—te la quitas tu o te la quito yo—se sienta en la esquina de su cama y espera que haga algún movimiento.

Tomo la parte posterior de mi blusa y la quitó, abre sus ojos al ver el gran hematoma en mis costillas.

Su mirada se dirige a mi brazo y lo observa mejor, este está un poco más colorido que el otro.

—date la vuelta—como tonta obedezco y suelta un pequeño suspiro de coraje—¿Quién te hizo eso?—pregunto mientras me ponía la prenda.

—Preguntale a tus amigos—sin más salgo de su habitación para ir a la de Meiying.