𝐅𝐎𝐑𝐁𝐈𝐃𝐃𝐄𝐍 𝐂𝐎𝐔𝐏𝐋𝐄 | Cheng Lu ✓

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(advertencia de +18)

Cuando perdimos a la policía de vista, lo observo, su labio sangraba al igual que su nariz, sin contar su ceja un poco rota.

Cómo agradecimiento lo invito a mi casa.

Al llegar subimos las escaleras, abro la puerta de la casa y lo dejo pasar.

Lo guío hacia mi habitación y voy al baño por el kid de emergencias.

Regreso y tiene que levantar un poco la cabeza, con un poco de algodón y alcohol limpio su nariz, el hace un mueca de dolor y me pongo un poco nerviosa.

—lo siento—digo en un hilo de voz y sigo curando sus heridas, voy hacia su ceja y limpio la sangre, para después la herida.

Suelta un gruñido y voy a su labio, lo limpio delicadamente y habla.

—¿Por que no lo limpias tu?—me pregunta y después de unos segundos entiendo. Tomo su cuello y dejo un pequeño beso para no lastimarlo más.

Sigo limpiando los restos de sangre, tomo su mano y también la limpio, pues está llena de sangre ajena y también de él.

Termino y dejo las cosas aún lado para tirarlas.

Antes de que haga algo toma mi cintura, lentamente para que no me duela.

—Gracias—nunca lo había escuchado darme las gracias.

—Gracias, por defenderme—le digo a lo que el sonríe levemente.

—Merezco un premio ¿no?—el color amenaza con subir a mis mejillas a lo que el ríe.

—¿Que quieres de premio?—le pregunto a lo que el acerca sus labios a los míos.

Nuestras respiraciones chocan haciendo que me susurré.

—Un beso—sin más, le doy un beso lento, pues tengo miedo de lastimarlo.

Nos separamos del beso y hace que me siente en su regazo, a horcajadas.

Toma mi mentón e intensifica el beso, es lento pero deseoso y caliente.

Mis manos de estar en su cuello pasan a su pecho.

Sus manos levemente frías se meten en mi sudadera, acariciando mi cintura desnuda. Suelto un pequeño jadeo por el tacto frío y suelta una pequeña risa nasal.

Nos separamos del beso y sus labios se estampan en mi cuello, lo besa y lo chupa, mientras yo suelto suspiros.

Sube desde mi cuello a mis labios y nos seguimos besando, sus manos viajan de mi cintura a mi trasero, el cual aprieta sin vergüenza alguna.

Mis manos van a su pecho por debajo de su playera, y exploran su pecho y sus abdominales.

Nos separamos y beso su cuello, suelta pequeños suspiros roncos y hace que sienta cosquillas en mi entrepierna.

Me quita mi sudadera haciendo que quede en mi sostén color rosa palo. Mis bellos de los brazos se erizan por el frío que está haciendo.

—Espero que para la próxima ya no tengas esto—toca lentamente la parte donde está mi hematoma.

Besa mi clavícula, y la parte de arriba de mi pecho, suelto pequeños suspiros mientras entrecierro los ojos por el placer.

Mis manos retiran su playera y lo empujó suavemente en la cama.

Al tener el mando en estos momentos beso su cuello y bajo lentamente.

Acaricio con mi mano mientras beso sus abdominales, su pecho y la parte baja de su abdomen.

Sus manos recorren mi espalda y con algo de dificultad desabrocha mi sostén.

Me da vuelta, quedando debajo de el, se apoya con sus brazos para no dejar caer todo su peso sobre mi.

Besa mi cuello y baja hasta mis pechos. Mientras uno lo chupa y lo muerde levemente el otro lo acaricia. Ruedo los ojos del placer y baja sus besos hasta mi abdomen.

Vuelve a mis labios y los besa, mientras quita mis licras negras, mis bragas del color del sostén quedan a su vista.

Se levanta para bajar su pants grises, dejando ver sus boxers un poco húmedos y con una gran erección.

Al igual que el me levanto de la cama pero antes de poder hacer algo la puerta de la casa se escucha.

—Mierda, mierda—maldigo mientras me pongo mi sostén lo más rápido posible.