PRÓLOGO

12 0 0
                                    

Mi respiración es inestable y agitada, mis manos las siento húmedas igual que mi cara y estoy a punto de ceder ante el cansancio. Los otros dos que van conmigo por estos oscuros corredores lucen igual, excepto uno. Pero en este momento solo tenemos un objetivo: seguir adelante. 

Rendirse no es una opción, juramos luchar hasta el final. Por todos los que perdimos en el camino, lucharemos hasta el final, o hasta tener una nueva oportunidad... 

El resto de la Sede 56 resiste el ataque como puede, pero es cuestión de tiempo para que también caiga. Éramos los últimos que quedaban de pie. Él ha llegado de imprevisto. Los últimos agentes han caído, y no tenemos más opción... Que utilizar el último recurso.

—¡Sigan de frente, yo los detendré todo lo que pueda! 

—¡No-!— Siento dos pares de manos jalándome de cada brazo. —¡Víctor... No nos hagas esto!

—Vuelve con ellos, y repara el error que nos condenó a esto...— Esas fueron sus las últimas palabras antes de desaparecer volteando por el pasillo. 

—¡No te distraigas, Ghost! ¡Debes llegar al búnker...! 

—¡Cuidado!— Cinco hombres fuertemente armados salieron por la izquierda y comenzaron a disparar. Jalo a mi compañera hacia atrás, ambas caemos al suelo y nos arrastramos hasta una esquina para ocultarnos. 

—¡¿Tienes algún plan, Sullivan?!— Veo como queda pensativa, mientras los disparos seguían llegando. 

—Ghost, tú tienes que seguir adelante. Ambas no saldremos de aquí. 

—¿Qué...?— No termino de formular la pregunta, cuando ella me jala de mi casaca y grita. 

—¡Deja de preocuparte por los demás ahora y sálvate tú! ¡Si mueres, nadie más podrá vengarnos! 

Sullivan...— La nombro. En verdad esto no puede estar pasando. 

—Escucha, ya no queda tiempo. Dile a Ichirō que lo intenté, pero ahora no podré estar a su lado. Dile que me busque cuando lleguen a su destino. Que nos busquen y detengan de una vez por todas al hijo de perra que tanto mal nos ha hecho. ¡Véngate de quién te hizo daño! ¡Ayúdanos a vengar a todos los que han caído! Asegúrate que no vuelva a pasar. Júralo, Ghost. 

Sullivan desenfunda sus pistolas ya cargadas. —Te daré tiempo, pero será muy breve. Debes continuar, y así expiar todos nuestros errores... 

—Fue un gusto conocerte, Sullivan.— Respondo resignada.  

—Espero volver a conocerte, Ghost.— Nos miramos unos segundos. Sullivan voltea hacia el frente. —¿Lista? A la cuenta de tres.

Me inclino un poco, preparándome para correr.  

—¡Tres! 

Ambas salimos, Sullivan iba delante de mí. Al estar ella al frente, le dispararon a quemarropa, pero eso no la detuvo para responder el ataque, matando a tres de los cinco. 

—¡Huye...!— Oía como forcejeaba con los tipos, pero no me detuve.  

Tal como dijo Sullivan, continué corriendo. Sin mirar atrás. 

Lost mission - ‟Cueste lo que cueste..."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora