❥𝟶𝟼; ❛𝙼𝚒𝚎𝚍𝚘❜

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Estoy asustada, muy asustada

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Estoy asustada, muy asustada.

Desde esa cena con Paulo estuve alerta a todo a mi alrededor, quisiera tener ojos en cada parte de mi cuerpo. No estoy tranquila, en lo absoluto.

Lorenzo volvió, ¿cómo mierda voy a estar en paz?

Lorenzo es mi ex. Es el peor ser humano que conocí en mi vida. Está en el segundo lugar en mi top tres, el primero es mi papá y la tercera es Camila.

Se preguntaran, ¿por qué es para mí el peor ser humano? Fácil, porque cuando estábamos juntos era la persona más tóxica, hija de puta e interesada que conocí. Quería controlarme a como diera lugar, aparte de que a toda costa quería que hagamos "oficial" nuestra relación al público, cosa que yo no quería. Sé como son los medios y no quería eso para nuestra relación, deseaba privacidad y paz, y a él no le gustó, se volvió un toque violento. Ahí fue que supe que estaba conmigo por interés y fama, así que lo dejé. Desde entonces me acosa y no me deja tranquila; a donde iba, él estaba o me llegaba una nota de su parte.

De esto hace dos o tres años. Había logrado sacármelo de encima al bloquearlo de las redes sociales y siendo discreta cuando iba por algún lado, pero como esto de que "estoy" con Paulo salió en todos lados, se le hizo fácil encontrarme en Turín.

Lo denunciaría, pero eso seria darle la atención que tanto quiere, darle el gusto. Y yo no se le voy a dar.

Dejé una de las últimas cajas en el suelo suspirando, y Paulo entró atrás mío con otra. Él ama a mi mamá, pero a mi me odia. ¿Por qué? No sé, y no me importa. Mientras no se meta con mi viejita, a mi que me haga o diga lo que quiera.

—Mari, ¿donde dejo esto? —le preguntó.

—¿Qué dice arriba? —se giró a verlo.

—Eh —el ojiverde frunció el ceño y bajó la vista para leer la parte superior de la caja—. ¿Coc?

—En la cocina, Pau —se rió.

El jugador asintió y se fue en dirección a la cocina.

Mi mamá había encontrado una casa y se había enamorado, así que no dude en comprársela, ésta ya venía amubleada. No era muy grande ni muy chica, lo justo para ella. Tenía tres piezas, tres baños –dos en unas piezas y otro en el pasillo de éstas–, un enorme patio con una pileta, una cocina–comedor y una sala.

Fui directo a la pieza de mi mamá y me puse a guardar su ropa como supe que a ella le gustaba, perdiéndome en mis pensamientos y recuerdos.

—Hija —una mano en mi hombro me sacó de ellos, sobresaltandome y provocando que se me caiga la percha de las manos—. ¿Estás bien? Últimamente te distraes mucho.

𝙰𝚖𝚘𝚛 𝙿𝚘𝚛 𝙲𝚘𝚗𝚝𝚛𝚊𝚝𝚘 | 𝙿𝚊𝚞𝚕𝚘 𝙳𝚢𝚋𝚊𝚕𝚊 (Pausada)Where stories live. Discover now