Hola soy Maite y tengo 16 les contaré cómo termine follandome al chef de mi casa. El se llama Dave y tiene 30 años está que se parte de bueno. Un día le tocó dormir en la casa porque muy temprano tenía que trabajar. En la madrugada me le metí al cuarto y allí lo vi acostado sin polera, solo con un Jogger color gris, que le marcaba toda su polla.
Se veía muy grande por lo que me dio curiosidad tocarla, me senté en el piso a la orilla de la cama y empecé a meterme los dedos, mientras la otra mano estaba en mi boca ya que no quería hacer ruido y despertar a Dave
— mmm aaaa que rico — susurraba yo aún con mi mano en la boca.
— Señorita Maite que está haciendo ? — habló Dave espantado por lo que había visto
Me paré de inmediato y bajé mi vestido
— Ehhh no... no es lo que parece Dave
Iba a la salida pero este me detuvo por un brazo.
— eres una traviesa
Sonreí coqueta
— me encanta tu polla, quiero que me la metas— mordí mi labio
— Estás pequeña no puedo hacer eso
Me quite mi vestido y quedé desnuda ante el, le puse seguro a la puerta y empecé a besarlo.
Dave me correspondía el beso, me tiró a la cama
— Habré las piernas nena
Hice lo que ordeno abrí mis piernas para el, este se calentó mucho y vi como su polla se ponía dura. Se acercó a mí y metió 2 dedos en mi vagina
— Ahh que rico papi — gemi
Dave me metía y sacaba los dedos cada vez más fuerte hasta que me vine
— Ah ... ah ... ah mmmm me voy a venir papi
Dave se acercó a mí y metió su polla dura dentro de mí lo hizo con delicadeza, pero después empezó con sus embestidas duras. Me gustaba mucho y sentía que me iba a venir en cualquier momento .
Este sacó su polla y empezó a rosarla por mi clotoris, luego se bajó y empezó a chupar mi vagina
— Que ricas estás preciosa
Metió su polla nuevamente en mi vagina y empezó a embestirme duro y me gustaba, de mi vagina caían fluidos que llenaban las sábanas, luego me vine encima de él. El sacó su polla y me dijo que la chupe y así lo hice. Empecé a mamarla y el solo decía
— Sigue nena lo estás haciendo perfecto
Dave se vino en mi cara y eso me gustaba, luego subí encima de él y comencé a montarlo hasta que nuevamente nos vinimos al mismo tiempo.
Ha pasado un año y lo seguimos haciendo siempre que podemos.
Me encanta follar con mi chef.
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