Lágrima de Luna (Versión Wattpad) #PGP2024

XIII - Necesitaba estar a su lado (Parte 1)

Pasamos la noche acampando en el bosque cerca del pueblo. Nadie se nos acercó, ni nos detuvieron cuando nos fuimos, solo nos dejaron ir. Seguramente se sentían aliviados de que no estuviéramos entre ellos. Habían empacado en sus mochilas una tienda y dos bolsas para dormir. Durante años Selene y Yue habían vivido en aquella casa ocultas, nadie sospechaba siquiera que eran brujas, mucho menos que tenían tal poder. Si me lo pensaba unos momentos, era una situación realmente triste, habían perdido su hogar, cada recuerdo apreciado, cada objeto de valor. Yue cada tanto le preguntaba sobre el asunto a Selene, pero ella solo respondía que las cosas materiales tarde o temprano se recuperaban, que debía ser paciente, además, había encantado los límites de su casa para que ningún ordinarie pudiera ingresar sin su consentimiento. Era algo así como la barrera que tenía Coven a su alrededor, nadie pensaría jamás en ingresar a esa casa. No obstante, una sombra amarga se avistaba en su rostro.

Debe de estar pensando en lo mismo que yo: ¿Quien fue? Era evidente que nos buscaban para asesinarnos, Selene se habría echo de muchos enemigos después de cazar tantos demonios al protegernos, sin embargo...

-podría haber sido Ivette nuevamente -dijo Yue.

Era algo que todas estábamos pensando, pero quizás por respetar mis sentimientos, nadie lo decía en voz alta.

-puede ser -dije intentando darle la importancia adecuada a la solución de este problema.

-es muy probable, aunque haya eliminado el beso de demonio, sabían perfectamente donde nos encontrábamos -acoto Selene.

-lo lamento -dije en un susurro- yo llevé esos demonios a su hogar.

-la casa estaba protegida contra demonios -siguió hablando Selene, haciendo caso omiso de mi disculpa- quien quiera que fuera superaba el poder de aquella barrera. Esta es diferente a la de los ordinaries, está creada para eliminar a cualquier demonio medianamente fuerte que intente traspasarla. Debimos habernos ido una vez me deshice de Hatman.

No dejaba de culparse por lo sucedido, sin embargo, siempre se mostraba serena.

Antes de que anochezca, Selene envió varios búhos, de aquellos que ella invoca con facilidad, a merodear por la zona en un rango de un kilómetro de distancia, así estaríamos seguras de que ningún demonio, o humano, nos atacaría por la noche, además de que puso un escudo para ocultar nuestra presencia.

Aprovechamos la noche al aire libre para observar las estrellas, realizamos meditación acompañadas de los cuatro elementos bajo la luna menguante, junto a las horas de practica con el elemento del agua y del viento, ya me estaba acostumbrando a utilizarlos. Selene no paraba de decirme que tenía un don para ello, algo que me enorgullecía de mi misma, y pensar que, si hubiera sido por elección mía, sería una Musicis Witch.

Durante la madrugada conversamos durante horas, pude conocer más de cada una, por lo que parte de la noche se volvió una pijamada muy alegre. Yue se había quedado completamente dormida dentro de la tienda, procuro acostarse boca abajo, ya que, si bien su herida se encontraba cerrada, aún estaba resentida. Selene estaba afuera avivando el fuego cuando me acerque a calentarme las manos, era una noche fresca a pesar de que estábamos en verano.

-es por la combinación de ambos elementos -me dijo a pesar de que no había comentado nada, en ocasiones parecía leerme la mente- tu cuerpo se acostumbrara con el tiempo.

-¿tú crees? Espero no congelarme en el proceso -bromeé.
Respondió con una media sonrisa y prosiguió.

-los elementos son sabios, nunca dañaran a su usuario a menos de que este los obligue.

-son demasiado fuertes como para lograr hacerlo, nunca tendré esa fuerza.

-no es fuerza, es voluntad. Siempre y cuando confíes en tu inmenso poder, nada podrá frenarte, ni siquiera los elementos -aparto la mirada del fuego y me observo, su mirada era cálida, como si mostrara un inmenso orgullo- si tan solo tuviera más tiempo para entrenarte, serias una bruja muy poderosa, nadie ni nada podría derrotarte.