𝐕𝐈

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Capítulo número seis.

Capítulo número seis

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Kala. 31 de octubre del año 2023.

Después del poco almuerzo que cae en mi estómago, me dirijo al baño para darme una cepillada, me lavo la cara, me pongo gloss en los labios por el ambiente un poco frío y salgo disparada para mí auto, con intenciones de buscar en la oficina del Coffee de Gagnon.

Miro mi reloj mientras camino apresurada hacia el vehículo y al ver que son la 1:08 de la tarde, gruño furiosa; tiempo suficiente para que el jefe de Gagnon haya tomado la evidencia.

Me subo la auto mientras sigo cuestionando cosas en mi mente; si Gagnon ya había sido visitado por otros detectives y hasta ahí habían llegado, es porque los compró, y no solo él está implicado... Sino también sus empleados.

Por eso su aparente amabilidad.

Conduzco determinante y llego en menos de veinte minutos al local. Bajo del vehículo con el arma blanca en mi cinturón y cuando mi vista choca con el Coffee frunzo aún más el ceño; cerrado. ¿En serio?

Paso, sin esperarlo mucho, a través de la parte de afuera de la estancia hacia la puerta para entrar y si eso, forzar la puerta.

Pongo mi mano en la perilla, al hacer fuerza no abre, y como mi adrenalina está a mil por hora, tomo el arma y pego un disparo en la cerradura así consiguiendo entrar; donde está el mostrador sin nadie atrás, y las sillas y mesas extrañamente decoradas.

Miro en todas direcciones para cerciorarme de que no halla una trampa y a penas noto el pequeñísimo puntito rojo parpadeante en la esquina del local, que queda encima del pasillo que da a la oficina, trago en seco al creer que puede ser una cámara de seguridad minúscula, que a decir verdad, no tengo idea de cómo fue que la vi.

«Maldita sea, olvidé apagar las cámaras de seguridad». Pienso mordiendo mi mejilla pero de repente frunzo el ceño, al darme cuenta de algo, y ahí abro mis ojos de golpe;

Yo ya las había desactivado.

Y eso no es lo peor, sino que hay un 99% de probabilidad de que sea una bomba. Vaya, sí que iba todo color de rosa... Infelices desgraciados. Ay, calma Ashley... Calma. Sin esperar mucho, miro en todas direcciones para ver si puede haber un activador pero, al no ver nada, mi sentido de alerta se activa instantáneamente; porque puede que sea a penas visible.

Son astutos... ¿Qué mencionó Gagnon?

"— Lo que siempre pasa, y todos terminan abandonando... El Reveb."

¿Reveb?, ¿Pero qué rayos es eso? Agh... Maldito asesino.

Ante eso tenso mi mandíbula furiosa y me regaño por no haber abierto mejor mis ojos, antes de que mordiera el ansuelo, antes de que cayera en su mentira, sin embargo, de repente algo me llega a la mente, algo que mencionó la Sra. Miller cuando fui a verle;

𝐃𝐞𝐬𝐩𝐚𝐜𝐡𝐨 108 © [𝐂𝐎𝐌𝐏𝐋𝐄𝐓𝐎✓]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz