12 Todo fue tan rápido

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Llegué al pequeño lago congelado, tomé los patines y comencé a sacar todo mi enojo. No me puse a pensar en nada más, hasta que de nuevo el cansancio me dominaba, ni siquiera podía llorar.

Tenía mucho tiempo patinando, mi cuerpo estaba magullado y dolía demasiado. No sabía que el sexo fuese tan agotador.

—Señorita —escuché a Olga—. ¿Se encuentra bien?

—Olga —me detuve y la miré, estaba sola—. Quiero estar sola.

—Se ha ido —me detuve y volví a mirarla—. Iván se fue con él, ellos... se han ido.

— ¿A dónde?

—Estuvo dormida casi toda la tarde, Iván me dijo que a los días de que usted llegó, Viktor encontró a su madre y desde entonces el señor Luka la ha buscado —salí de la dura superficie—. La encontró gracias a que pudo encontrar a Ben.

—Ben no es malo.

—Usted no lo conoce realmente —sacudió la cabeza en negación—. Él es una mala persona, se disfrazó de oveja, estaba esperando el momento adecuado para llevárselas.

—Olga, mi infancia no fue tan mala como Luka lo recuerda, yo siempre estuve rodeada de amor.

—Porque el señor la cuidaba —me acercó un abrigo—. Luka siempre estuvo cuidando de usted. Iván era su mejor amigo desde niño, su padre ayudaba al señor cuando era joven porque sabía que haría bien las cosas cuando creciera. Él también sabía que...

— ¿Qué? —me detuve al quitarme un patín y la miré—. ¿Acaso, todos sabían lo que él sentía por mí, menos yo?

Su silencio me dio que pensar.

—Tampoco lo dijo abiertamente, pero cuando supe que él había ido a América, convencí a Iván para que hablara —se notó el sonrojo a pesar de su morena piel—. No con los mejores métodos, pero terminó contándome que fue por usted. Cuando era pequeña y mamá cocinaba en casa de los Volkova, yo lo observaba, sabía lo que la señora Alya hacía con él...

— ¿Tu sabes de eso?

—Yo siempre me escondía por la casa, me gustaba mucho pasear por el jardín —miró la nieve en el piso—, o me gustaba mucho observar todos los adornos que tenían esparcidos por las paredes y los enormes jarrones.

Me quité el otro patín y escuché con atención la historia que desconocía de la chica que se la pasaba detrás de mí desde que llegué aquí.

—Cuando usted llegó, recuerdo que me daba miedo que el joven no jugara más conmigo, pero Iván decía que nosotros tres estaríamos juntos por siempre —sonrió ante el recuerdo—, y aquí estamos, viviendo en la misma casa, con diferentes labores, pero juntos.

— ¿Cuántos años tienes?

—Veintiséis —me miró—, Iván tiene veintiocho y Luka...

—...veintisiete —termine por ella—. Olga, yo no recuerdo verte en la casa.

—Siempre me oculté. Después mamá comenzó a entrenarme para crecer y servir a la familia tal y como ella lo ha hecho siempre. Nuestro deber y lealtad es hacia los Volkova.

— ¿Por qué no hiciste algo diferente en tu vida?

—Porque tenemos una deuda de años con ellos —su rostro se tornó triste—. Y mis hijos y sus hijos y los hijos de sus hijos servirán a la familia.

¿Qué había sucedido para que Olga tenga que deber tanto? Luka no se ve que sea una persona cruel.

—Olga —tomé su mano.

Barrera de hielo (Saga "camino a la libertad 2")Where stories live. Discover now