gentle | megumi x tn

01

Conocías a muchas personas, no fuiste especialmente sociable, pero siempre de alguna u otra manera lograbas entablar amistades con otras personas por lo que siempre estabas rodeado de tus amigos, quizás algunos más cercanos que otros pero aún así la soledad no era algo a lo que acostumbrabas. La escuela era generalmente tranquila pero él definitivamente era un huracán que pasaba cada cierto tiempo por todo el establecimiento.

Era alto, realmente alto con hombros anchos y de aspecto delgado pero aún así era imposible apartar los ojos de su esbelto físico, su largo cabello oscuro con un leve reflejo azulado siempre revoltoso y en puntas que nadie sabía como lograba hacer que se vieran tan naturales, su preciosa y brillante tez pálida y sus manos grandes, dedos largos y delgados, sus uñas perfectamente cuidadas y su rostro hermosamente perfilado, sus largas y envidiables pestañas oscuras que escondían sus lindos ojos azules que al mirarlos podías sentir que te hundías en el profundo y oscuro mar.

Todo en él era completamente encantador.

Era como si el mar te arrastrara hacia lo más profundo, pero aún así no te quejarías, nunca lo harías después de todo él te gustaba.

Megumi Fushiguro

El único ser que te ha atraído tanto y de manera tan intensa ha sido él, como una ola que es imposible no dejarse arrastrar.

Llevabas casi tres años atraída por él, desde que tenías 14 y él 15, ha pasado mucho tiempo en el que no has avanzado absolutamente nada en tu relación con él, ¡Incluso! Ni siquiera hay una "Relación" entre tú y él, ¡En absoluto!

Ni siquiera estabas segura de que Fushiguro supiera de que existes o quizás si, han hablado un par de veces pero realmente no fue mucho y todo fue relacionado con tareas o deberes, por lo que realmente no podría llamarse conversación.

Suspiraste mientras mirabas hacia el pizarrón que yacía frente a ti, aún quedaba otros 30 minutos de clases y realmente no querías aceptar que te distrajiste con tus pensamientos sobre Fushiguro por lo que toda la materia nueva que habían pasado anteriormente se esfumó rápidamente, soltaste otro suspiro un poco frustrada por el poco control que tenía sobre tus propios pensamientos y diste todo de ti para concentrarte en la clase frente ti.

Realmente te sentiste aliviada una vez que terminó la clase, así que tomaste tus cosas y les dijiste a tus amigos que te ibas a adelantar a buscar una bebida a la maquina expendedora pero siendo sincera te sentías un poco ida debido a que Fushiguro rondaba por tu mente sin razón alguna, es como si tu mente decidiera girar alrededor suyo y no podías evitarlo.

Caminaste con lentitud casi arrastrando los pies, no eras una persona demasiado floja pero aún así te sentías un poco agotada, quizás frustrada, siendo totalmente sincera deseabas que Fushiguro te notara o que hubiera algún avance, en estos tres años ha sido totalmente nulo el avance con él y eso te frustra, aunque tampoco has tenido iniciativa de cambiar eso por lo que no deberías quejarte. Nuevamente soltaste un suspiro resignado mientras elegías una leche de vainilla en la máquina expendedora y pagabas, observaste con pereza como tu leche caía hasta que te agachaste a recogerlo, pero saltaste del susto cuando por el rabillo del ojo viste una figura oscura y alta (realmente alta) detrás de ti parada sin decir ninguna palabra, fue tal el susto que no pudiste evitar golpearte fuertemente contra la maquina frente a ti y te quejaste.

"¡Oh!" Escuchaste tras de ti pero el dolor de tu frente y nariz te preocupaba más.

"Lo siento mucho, no pensé que te asustarías así..." Ahora pudiste apreciar mejor la voz, dándote cuenta de lo suave y preocupada que sonaba pero aún así no pensaste en las siguientes palabras

"¡Debiste tener más cuidado! Asustar a la gente así... Mi nariz duele..." lloriqueaste un poco, no tenías tolerancia al dolor en absoluto y evitabas lastimarte en todo momento por lo que no era usual sentir dolor así que sobaste con cuidado tu nariz dolorida.

"Sí... lo siento fue mi culpa..." murmuró la persona detrás de ti mientras escuchabas el sonido de sus zapatos mientras él giraba en su lugar con nerviosismo sin saber qué hacer. "Ya sé, espera un momento aquí por favor, volveré enseguida" dijo rápidamente antes de que escucharas sus pasos correr hacia alguna dirección.

Suspiraste y finalmente te levantaste de tu posición agachada y te sentaste a un lado de la terrible máquina antes de seguir sobando tu nariz en un intento de apaciguar el dolor, temías que quedara hinchada o rojiza. Pasó el rato y escuchaste los pasos apresurados de la persona que te había asustado acercarse a ti y levantaste la mirada para poder quejarte un poco más con ella, pero al ver esos ojos azules oscuros con un brillo de preocupación y su cabello aún más despeinado de lo usual por correr en los pasillos realmente te quedaste sin palabras.

"Lamento la demora, la enfermera no estaba entonces tuve que buscar en todo el lugar algo de hielo para la hinchazón y realmente no soy bueno buscando... Lo siento..." dijo muy rápido pero aún así le entendiste pero tus ojos estaban fijos en él aunque Fushiguro no parecía darse cuenta debido a lo nervioso que se veía.

Aunque quisiste realmente no podías hablar, tu boca se negaba a abrirse para decir alguna palabra y tu mente no podía pensar en ninguna en este momento por lo que mantuviste el silencio. Fushiguro sin embargo no esperó por alguna respuesta y presionó la compresa fría en tu nariz con suavidad a lo que abriste los ojos con sorpresa pero te dejaste hacer.

Su toque fue gentil, podías sentir y ver su preocupación para no hacerte sentir más dolor de lo que ya hizo y por dentro te derretiste ante él pero te quedaste quieta aún procesando todo.

Fushiguro fue muy atento con sus cuidados incluso ignorando por completo el tono rojizo de tus orejas, estabas avergonzada y en el fondo esperabas que él no se diera cuenta de lo mucho que te afectaba su cercanía.

"Fushiguro puedo mantener la compresa yo sola..." murmuraste en voz baja mientras desviabas la mirada a un lado.

Al oír tu voz, él reaccionó y fue consciente de sus acciones lo cual sorpresivamente lo hicieron sonrojar y con cuidado dejó el hielo en tus manos para que aplicaras presión tú, y se separó dándote espacio...

"Lo siento mucho de verdad, por asustarte y eso..." dijo con voz baja mientras seguía observandote en busca de alguna mueca de dolor o algo así.

"Está bien, estoy bien, creo que no hay nada de lo que preocuparse..." dijiste mientras mirabas su figura nerviosa "Gracias por el hielo por cierto"

Él asintió y notaste como se mordía el labio con nerviosismo casi como si no supiera que más decir...

¿Megumi Fushiguro realmente estaba tan nervioso?

🐺

mi primer fanfic tras muchísimo tiempo espero les guste 💪🏻
y si hay algún error por favor avisenme