En una pequeña isla griega, vive una chica llamada Miyeon que está planeando su boda con el chico de sus sueños. Miyeon a lo largo de la historia, intentará descubrir quién es su otro padre, por lo que invita a tres hombres del pasado de su papá a l...
"So I say Thank you for the music, the songs I'm singing Thanks for all the joy they're bringing"
Miyeon se encontraba en el depósito de cartas hacia el extranjero, era de noche y hacía un poco de frío, pero ella no le tomaba importancia. Tenía en sus manos las cartas que estaba dispuesta a enviar.
-Lee Minho, Bang Crhistopher, Hwang Hyunjin- Fue diciendo Miyeon, mientras metía cada una de las cartas al depósito.
Esperaba que esos hombres vinieran a la isla, necesitaba descubrir la verdad.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
En distintos lugares del mundo, los tres hombres se dirigían con pasos apresurados a tomar un taxi, pues habían recibido una carta muy especial, de alguien a quien esperaban hace tiempo.
-¡Taxi!- Gritaron dos de ellos al mismo tiempo.
Viajaron hasta Grecia, donde bajaron rápidamente del auto que los transportaba, para poder subirse al barco que los llevaría hacia la isla, pero llegaron tarde, este ya había zarpado.
-¡Mierda!- Gritó uno de ellos.
-Opino lo mismo- Dijo agotado el otro, se dirigió hacia el letrero que contenía los horarios de los siguientes barcos.
-¿Cuándo sale el siguiente?- Preguntó el que había insultado.
-Tríti- Por la cara del otro, se dio cuenta que no lo entendió. -Martes, ese día sale el siguiente-
El hombre pelinegro llamado Hyunjin, sacó la carta que recibió, para leerla una vez más.
-¿Novio o novia?- Preguntó el hombre castaño llamado Minho.
-Novio, hace tiempo que no lo veo- Respondió el otro.
Minho solo asintió, estaba pensando que iban a hacer, pues ese día era domingo, por lo que tendrían que buscar algún hotel en donde hospedarse.
-¡Oigan!- Gritó alguien, Hyunjin volteó hacia todos lados, buscando a la persona.
>>¡Aquí arriba!- Ambos voltearon hacia el cielo, viendo a un hombre de pelo rubio, colgado de un mástil, que pertenecía a un yate blanco.
>>¿Necesitan ayuda?- Preguntó sonriente el hombre.
Al parecer ya tenían una forma de ir a la isla.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.