die for you, han seojun ★

𝐱𝐯. i don't wanna live

｡ﾟﾟ･｡･ﾟﾟ｡
i've been looking sad in all the nicest places
baby, baby, i feel crazy
i see you around in all these empty faces
all night, all night and every day
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Esa noche Hana no pudo pegar el ojo. Estuvo toda la noche dando vueltas en la cama mientras miles de pensamientos por su segundo golpeaban su mente como balas disparadas a matar. Hana se preguntaba por qué seguía viva.

La verdad era que ella no quería suicidarse como tal, pero moriría con una sonrisa si un auto la aplastara y le arrebatara la vida. Estaba cansada todo el tiempo y ya ni siquiera podía dormir bien. Todos los días era atormentada por algo y estaba exhausto por ello.

— Ya no quiero vivir.— murmuró ella mientras miraba el techo con un puchero. Estaba harta de tener que soportar tantas cosas teniendo una vida tan mediocre.

Su mamá había muerto, su papá no la quería, había sufrido bullying y difamación, perdió a su mejor amiga, su mejor amigo murió, tenía (casi) prohibido estar con Seojun, era vigilada por todos en la escuela, y ahora Gowoon parecía detestarla.

Realmente había muy pocas cosas buenas por las que valía la pena seguir adelante pero ahí estaba todavía, deseando poder dormir para ya no despertar nunca.

Sin que ella lo supiera su hermano salió por un momento de la casa para encontrarse así con Han Seojun, quien iba en busca de sus llaves. Seojun estaba tenso y molesto, muy enojado por las circunstancias que él consideraba injustas.

¿Lee Suho podía re-hacer su vida y ser feliz pero él no? ¿Por qué Suho podía estar con quien quisiera (como Lim Jugyeong) pero él no podía estar con Hana?

— No lo esperaba de ti.— dijo Seojun con un tono burlón.— Dame la llave.— dijo sin rodeos ni expresión en su cara. Suho solo las sacó de su bolsillo y se las lanzó.

— Me gusta Lim Jugyeong.— confesó Suho.

— ¿Ah sí?— preguntó Seojun desinteresado.— ¿Qué? ¿Te felicito?

— Sé que le has preguntado si ella y yo somos pareja,— dijo Suho.— no uses eso para vengarte de mí. Tampoco a Hana.

La cara insípida de Seojun se convirtió en una de molestia, ¿cómo era tan cínico para decirle eso si por su culpa él y Hana no podían estar juntos?

— ¿Y si no la estoy usando?— preguntó.

— ¿Ella de verdad... te sigue gustando?— Seojun soltó una mezcla entre bufido y risa. Se sentía molesto, pero actuaba irónico.

— ¿Que no es muy obvio? ¿Crees que de verdad hago esto solo por ti?— cuestionó Seojun.

— Sé que piensas que no hice nada por ayudar a Seyeon.— dijo Suho molesto. Parecía que no tenía nada que ver, pero las cosas estaban más conectadas de lo que le gustaría a cualquiera de los dos.

— Sí, y esa es la verdad, Suho.— dijo Seojun con enojo y entre dientes.

— ¿Cuánto tiempo seguirás pensando eso?— preguntó Suho desesperado, aunque hacía lo posible por actuar calmado.

— ¡Hasta que te mueras!— gritó Seojun, los ojos de Suho se cristalizaron.— Y lo veas a los ojos...

Se miraron por unos segundos en silencio. No pasaron ni cinco segundos cuando Seojun se dio cuenta de lo que dijo y lo horrible que fue, pero ya era tarde y no iba a retractarse.