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Al principio, Yoongi no pensaba mucho acerca del nuevo compañero de cuarto que iba a vivir con ellos pronto. Él solo rezaba interiormente a sí mismo que el nuevo chico no fuera a interrumpir sus tranquilas siestas o ser irritantemente ruidoso todo el tiempo.

Y en realidad obligó a Namjoon que escribiera las palabras exactas –con negrita y subrayado- en la lista de clasificación de su 'Yolo: estamos buscando por un compañero de cuarto para compartir el alquiler!' (No lo miren a él, fue por completo idea de Namjoon) pegados en algunos lugares alrededor de la universidad.

Tres días después de eso, alguien con una graciosa voz aguda y chillona les llamó –de hecho, llamó a Yoongi ya que olvidó revisar que el idiota de Namjoon puso su número en los avisos- y emocionado les dijo que realmente estaba interesado en ser su compañero de cuarto.

Acordaron reunirse con el chico primero, solo para asegurarse que ningún asesino serial fuera a ser su compañero de cuarto. Como sea, Park Jimin no era como un asesino serial para nada, ni siquiera cerca, tal vez ni siquiera podía matar a una araña o patear un perrito, Yoongi meditó.

A su lado, escuchó a Namjoon arrullar suavemente "Aw, él es lindo." –Ugh, cómo se le olvidó que a Namjoon inusualmente le gustaban las cositas adorables. Cuando ambos se presentaron, el niño –aprendieron que era un año menor que Namjoon y dos más joven que Yoongi- les sonrió con alegría. Oh. Entonces cortésmente les preguntó si podía llamarles hyung, y por supuesto que Namjoon dijo "Claro, adelante" en un nanosegundo mientras que Yoongi apenas tuvo tiempo de asentir.

Eventualmente, ellos recibieron a Jimin en su habitación un par de días después, como su compañero de cuarto.


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Ciertamente Jimin no era lo que Yoongi esperaba cuando tuvo una profunda discusión con Namjoon de que necesitaban a alguien que les ayudara a compartir el alquiler con ellos.

Bueno, aunque la alegría del chico siempre aterraba a Yoongi, su brillante sonrisa hacía que la aburrida habitación se viera más viva que nunca.

Namjoon se veía más feliz y sorpresivamente, Yoongi estaba un poco más feliz también –no es como que lo admitiera en alto, jamás.

Había un montón de ventajas al vivir con Park Jimin, pero algunos de los hábitos de Jimin hicieron que Yoongi lo volviera a pensar. Sin embargo, Namjoon no se quejaba para nada de ellos, este tipo era demasiado aceptable.

Y uno de estos hábitos siempre provocaba que Yoongi se sintiera incómodo en la mesa cada mañana.

Resultó ser que Jimin era más que un cocinero decente, mientras que Namjoon y Yoongi solo cocinaban cosas quemadas o algo con extraño sabor, por lo que felizmente aceptaron darle la tarea a Jimin cuando el chico lo pidió.

Cada cosa que había cocinado desde el día en que llegó, todo, era delicioso. Si alguien señalaba que Namjoon y Yoongi se veían... Más gordos que antes, culpen a Park Jimin. Desde que Jimin estaba con ellos, siempre comían con gusto el desayuno cada mañana antes de ir a donde quisieran ir y siempre volvían a la habitación a cenar juntos todos los días también.

Hoy día no era diferente.

Yoongi se despertó con el buen olor de tocino, huevos y café.

"¡Buen día hyung!"

Jimin lo saludó con alegría desde el área de la cocina cuando Yoongi caminaba atontado fuera de su habitación. Namjoon solo lo saludo con un movimiento casual de mano y continuó leyendo algo en su celular, tomando su usual puesto en la mesa.

Y Yoongi no estaba preparado para esto. Si no estaba completamente despierto antes, ahora lo estaba.

Jimin estaba ahí, cocinando algo y con su espalda hacia ellos, esto ocurría cada mañana y honestamente era una buena escena.

Pero Park Jimin tenía este extraño hábito, a él no le gustaba usar pantalones cuando dormía o cuando estaba en la casa en general. Así que, Yeah, Yoongi era recibido por la gloriosa vista de sus piernas desnudas. Muslos. Pantorrilas. Uhm, una buena mañana sin dudas.

Sin hacer ruido se deslizó en su asiento junto a Namjoon, tratando de evitar en la dirección donde Jimin estaba.

"Hyung, estás babeando" Namjoon amablemente le dijo, sin quitar sus ojos del celular.

"¡No lo estoy!" Yoongi le regañó pero pasó el dorso de su mano en ambos lados de su boca, solo por si acaso.

Namjoon solo se hundió de hombros. "Si tú lo dices, pero en serio hyung, ¿aún no te acostumbras? Te ves tan torpe."

"¿Acostumbrado a qué?"

"A eso, obviamente" señaló con su mentón a 'eso'.

Y por 'eso', aparentemente Namjoon se refería a Jimin y su holgada playera blanca que cubría toda la parte superior de su cuerpo y alcanzaba hasta la mitad de sus muslos, debajo de eso todo estaba libre a la vista. Aunque lo que había bajo esa camisa todavía era un rompecabezas para Yoongi que tenía que resolver.

Yoongi gruñó y lanzó de vuelta, "¿Lo hiciste tú?"

"Por supuesto, es una buena vista, ¿no crees?" él asintió con una expresión tranquila pero había un brillo de satisfacción en sus ojos.

"... Suenas exactamente como un pervertido ahjusshi."

Pero Yoongi estaba 100% de acuerdo con él, en secreto.

"Hyungs, por favor no hablen como si no estuviera aquí" Jimin dijo sin expresión mientras posaba la reciente comida en la mesa antes de tomar asiento en frente de Yoongi. "Solo porque no me guste usar pantalones no significa que tenga la intención de enseñar o mostrar con orgullo mis piernas para ustedes, ¿entienden a lo que me refiero?"

"Absolutamente" Namjoon sonrió, enseñando sus infames hoyuelos –que por alguna razón desconocida siempre hacia desmayar a las ahjummas del vecindario. "Pero realmente no podemos evitar apreciarlas, ¿sabes? Desde que tú... Generosamente las desnudas para nosotros poder verlas cada mañana y cada día. Es refrescante. Prefiero ver esto todo el día y noche que los pantalones de Ben10 de Yoongi."

Yoongi miró fijo, asesinamente, a su amigo pero su regaño lentamente se transformó en una sonrisa de costado cuando repentinamente notó a alguien sonrojándose con fuerza.

"¿Oh? ¿Por qué el pequeño Jiminnie se volvió tímido tan de repente? ¿No fuiste tú quien de buena manera nos presentabas esas bonitas piernas tuyas cada mañana desde el comienzo? Ni siquiera las solicitamos, ¿cierto?" preguntó a Namjoon y su amigo obedientemente le dio un pulgar hacia arriba.

"Seh, ni siquiera una vez"

Jimin gruñó y prácticamente golpeó su cabeza en la mesa. "¡Ugh! Los odio tanto a los dos, en serio. Solo llenen sus rostros y piérdanse por favor, hyungs."

¿Había mencionado lo mucho que les encantaba molesta a Jimin?

Dos burlones hyungs rieron ante el adorable dongsaeng pero eventualmente volvieron a disfrutar sus desayunos.

"Nah, sabemos que nos amas" dijeron simultáneamente antes de chocar palmas bajo la mesa.

"¿Podrían parar ya por favor? ¡Realmente los odio ahora!"

"No, no lo haces."

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I got you «Yoonmin/Nammin»Where stories live. Discover now