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Encerrada en su cuarto mirando fijamente un punto preciso de la tronera, donde se podía apreciar la lluvia intensa con su sonido cautivante, ella llenaba su cabeza de preguntas irritantes que la dejaban desanimada y con un autoestima casi llegando al suelo, tomo un vaso y lo lleno de vodka mientras contemplaba su ventana encendió un cigarrillo.
Miles de preguntas pasaban por su cabeza, completamente confusa y apuntó de estallar. Mientras escuchaba la lluvia pensaba en aquel muchacho atractivo que conoció por sitio web, era un chico de más menos 16 o 17 años, tenía sus ojos color pardo y unos labios sonrosados.... En un momento quiso hablar con él, pero su timidez y sus pensamientos no la dejaban. Reflexionó la mitad del día y al caer la noche dejó sus miedos de lado y le hablo a aquel apuesto muchacho, como típica conversación se preguntaron mutuamente cosas comunes "que tal", "como fue tu día" y así.
Tuvieron una larga conversación, lamentablemente tuvo que acabar en el momento que era hora de ir a dormir, para ella fue la primera noche que pudo dormir con tanta felicidad. Pero inquieta y pensativa no podía consolidar su sueño, el joven la distraía en todo momento tenía una atracción tan grande hacia el, que ni ella podía creerlo ya que la muchacha NUNCA antes había sentido algo así por otra persona.
A pesar de todo la niña tenía miedo de demostrarle sus sentimientos, imaginaba que el joven se burlaría de ella... Pero ¿por qué nos da miedo decir lo que sentimos? somos jóvenes, no tenemos NADA que peder, vendrán más amores, más personas y etc.
No puedes perder lo que quieres por tener miedo, quizá el miedo al qué dirán o qué pasará más adelante, que
pase lo que tenga que pasar, para bien o paras mal, por algo pasan las cosas.

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⏰ Última actualización: May 18, 2016 ⏰

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