gffmhf

705 7 2
                                    

La película comenzó a filmarse en enero de 1974. Se trata de una película única tanto por la grandesa del proyecto como por las condiciones de su desarrollo. Pocas veces el cine se había adentrado así en la condición patagonica y mucho menos para abordar un tema como este. La empresa requería máxima organización por parte de la productora Aries, que había llevado hasta Santa Cruz a técnicos y actores y programado jornadas de rodaje en locaciones muy distantes entre si. La mayoría de las escenas fueron rodadas en localidades sin infraestructura o directamente a campo abierto. En muchas ocasiones, había que movilizar, además del equipo, a decenas de extras. Si una demora cuesta mucho dinero generalmente, hay que imaginar en la situación de La Patagonia Rebelde. Además, las noticias políticas que llegaban desde Buenos Aires eran preocupantes.

El 19 de enero de 1974 el Ejército Revolucionario del Pueblo atacó la guarnición de Azul en el marco del rumor acerca de la pobre salud de Perón. En ese contexto, el gobernador Cepernic desoyó al Estado Mayor Conjunto respecto a impedir el rodaje de la película. En efecto, Cepernic se subió a un avión y se presentó en donde se estaba filmando la escena de los fusilamientos, para poner a Olivera al tanto de la situación. Había que apurar el rodaje de una película que, por la situación política, tal vez nunca podría estrenarse.

La etapa de rodaje concluyó en los estudios Baires. De día fueron filmadas las escenas de interiores y de noche se iba realizando el montaje mientras se avanzaba con la banda musical. Con tan sólo un mes de pos producción, La Patagonia rebelde estaba lista para ser presentada al Ente de Calificación. Era el 5 de abril de 1974.

Al termino de la película, las autoridades del Ente de Calificación ya no eran las mismas que habían autorizado el guión durante la presidencia de Cámpora. El organismo estaba ahora constituido por una comisión de representantes de sectores del poder.
La película no se prohibió, sino que no fue calificada, cualidad requerida para su estreno. Las razones que daban fueron ridículas, según cuenta Olivera:
A todo esto, los medios anunciaban el estreno del filme. El publico había adquirido cercanía hacia la produccion local, por lo que la expectativa era mayuscula.

Principios de junio de 1974: ya pasaron dos meses de la presentación al Ente de Calificación y la película aún no había sido autorizada para su estreno.

A mediados de mayo, el general retirado Elbio Anaya , aquel personaje que aparece en la película caracterizado como Arzeno, negaba en el periódico La opinión la veracidad de los hechos relatados por Bayer en su investigación y dejaba en claro la posición del ejército en caso de estrenarse La Patagonia rebelde.

El 10 de junio Bayer y Olivera amanecieron con la noticia menos pensada. El secretario de prensa de Perón les comunicó: "el general acaba de ordenarme que den el filme ya mismo y en todos los cines del país". Hay dos versiones acerca de la decisión del general Perón de dar vía libre al estreno de La Patagonia Rebelde.

La versión de Bayer es tan factible como la de Olivera: finalmente, el 13 de junio se produjo el esperado estreno en un clima político mas y mas turbio. La respuesta fue la esperada. La buena disposición de los exhibidores y el peso propio de la propuesta cinematográfica posibilitaron su exhibición en salas de todo el país llegando a un millón y medio de espectadores. Luego de cincuenta años, los sangrientos sucesos de la Patagonia estaban siendo divulgados de un modo masivo, mucho más de lo que imagino Bayer al publicar su investigación.

Pocas semanas después de estrenarse, fue exhibida con gran expectativa en el Festival de Berlín; la película fue premiada con el Oso de Plata. Allí estuvieron Olivera y Bayer en el día que llegó la noticia de la muerte de Perón.
Si durante Perón el camino de La Patagonia rebelde había sido difícil, lo sería mucho más después de su muerte.

Con Isabel Martínez de Perón y López Rega en el poder, el ex crítico de cine Paulino Tato fue designado interventor del Ente de Calificación. La primera orden de Tato con respecto a La Patagonia rebelde fue su silenciamiento en los medios de comunicación y luego la prohibición de su venta al exterior. Hallar una copia en un campamento de la guerrilla para con fines didácticos y un episodio protagonizado por el ERP aceleraron el levantamiento de la película. Todo esto sucedió mientras la Triple A extendía su accionar hacia el ámbito de la cultura. Muchos protagonistas fueron amenazados de muerte y algunos se exiliaron.

La Patagonia rebelde quedó en silencio hasta el fin de la dictadura militar. Aquella escena final, en la que los terratenientes celebran la sangrienta represión del Ejército sobre el pueblo patagónico era más que una metáfora, era un presagio de lo que vendría.

En una entrevista, Osvaldo Bayer cuenta que llevó una copia en VHS a Barcelona durante un congreso de la Central Obrera Libertaria. Había creciente interés en ver la película, ya que muchos personajes eran de origen español. Pero el problema radicó en que la versión estaba doblada al alemán, y nadie entendió nada.

Lo bueno, la película no fue confiscada y los negativos y copias quedaron intactos, gracias a Olivera y la importancia de Cinematográfica Aries en la industria local.

Diciembre de 1983, final de la dictadura, Alfonsín a la presidencia. En enero de 1984 volvió a estrenarse La Patagonia rebelde con gran vigencia. Hay que recordar que los hechos relatados en la película sucedieron durante el gobierno de Yrigoyen, del mismo partido que inauguraba el periodo democrático. Casi diez años después, la película finalmente podía verse por todos y sin presiones en los cines.

Con los años, la película se consolidó como una de las más importantes de nuestra filmografia. Fue concebida durante la época mas difícil de nuestra historia contemporánea, debiendo sortear dificultades en sus etapas. Es como si los vientos sureños la hubieran curtido para enfrentar los golpes de personajes poderosos que buscaban ocultar la gesta de los peones y obreros Patagonicos.

hgvghvWhere stories live. Discover now