Decisiones

"Hola Nicky ¿Cómo estás? Quería desearte felices fiestas y preguntar si ¿ya sabes que quieres hacer? Cómo me pediste tiempo para pensar y ya han pasado unos meses, solo recuerda que yo sigo pensando en ti"

Podría parecer sencillo...

Podría parecer romántico...

Pero lo que ella sintió fue un enorme vacío en su corazón.

Llevo sus manos hasta su estómago y lo apretó con fuerza cuando un sollozo escapo de sus labios al leer aquel mensaje de WhatsApp que no se atrevió a abrir para que no apareciera como leído, prefería pasar la vida sin volver a abrir aquella aplicación antes que atreverse a responder.

¿Qué debía hacer?

La noche anterior soñó con ella, hacía mucho tiempo que no le pasaba pero eso no la alivio lo más mínimo.

Una espina que seguía clavada en lo más profundo de su corazón seguía sin querer marcharse, no podía arrancarla, no podía hacerla desaparecer y de alguna manera... aún se negaba a hacerlo.

Cerró la tapa del móvil y se apoyó sobre el respaldo del sofá mirando el techo y se dejó llevar, se dejó atrapar por aquella música que sonaba a través de sus cascos.

Ya habían pasado casi 3 meses desde aquello, 3 meses desde que de una de las formas más cobardes posible le pidió tiempo... a través de la misma aplicación que ahora se negaba a abrir.

Todo hubiera sido más fácil si no hubiera abierto su corazón a otra persona, a alguien a quien nunca vería en persona. Todo sería más fácil si nunca hubiera decidido entrar a un juego pero ¿sería ahora feliz? ¿Se arrepentía de ello?

Aunque ahora los recuerdos inundaran sus ojos de lágrimas que se negaban a salir, aquella época fue verdaderamente feliz. Tenía un motivo para levantarse y acostarse tarde todos los días, un rayo de luz, una estrella más brillante que todas las demás.

¿Cómo sería ahora su vida si nunca la hubiera conocido? Puede que si nunca hubiera aparecido ahora fuera feliz con su ex, con la chica de la que se enamoró en el instituto... su amiga, la que le sonreía cada mañana, la que le abría las puertas como un verdadero caballero... su primer amor.

Maldito destino... ¿Por qué le hizo eso? ¿Por qué después de tanto tiempo esperando tener una posibilidad con su primer amor tuvo que poner a alguien en su camino antes? ¿Por qué tuvo que aparecer la chica de la voz más dulce? ¿Cómo consiguió abrirse paso en su corazón? ¿Cómo podía haberse vuelto tan dependiente de ella? ¿Por qué tenía que vivir tan lejos? Y lo peor de todo... ¿Cómo haría ahora para poder vivir sin ella?

Si tan solo hubiera hecho las cosas bien...

Si tan solo no la hubiera traicionado...

Si tan solo hubiera escogido un camino diferente en su momento...

Incluso si tan solo hubiera decidido no responder un mensaje, ahora las cosas serían diferentes y tal vez sería feliz... tal vez, pero ahora era muy tarde... El primer amor fue sustituido por uno nuevo, uno más fuerte y no podía traicionar a su corazón, no podía volver con su ex... no podría vivir otra vez aquella mentira, no podría besar sus labios deseando que fueran los de otra persona... unos labios que nunca probo y ya, nunca lo haría.

Nicol sonrió con desgana al darse cuenta de ello y cerro los ojos.

"Maldito pequeño, no podré volver a ser feliz al mirar el cielo"