Adiós, amor mío. [Viktuuri]

Adiós, amor mío.

Los tiempos cambian, la vida sigue y yo sigo aquí, decayendo por su pérdida.

Parecía ayer cuando estábamos juntos.

(...)

Tu mirada tímida, tus gestos dulces, tu manera de andar tan inocente y ni siquiera te dabas cuenta, ni siquiera cuando todos los chicos te veían y te devoraban con su mirada. Cuanto lo odie.

Lo mejor que podía haber en este mundo era el abrazarte, sentir tu aroma y tenerlo guardado en mi sudadera. Aquellas dulces caricias que nos dábamos al anochecer, tu cabello negro como la noche y tus preciosos ojos cafés, siempre brillantes y amables.
Estoy enamorado de ti, mi dulce tesoro, amor de mi vida.

-Te amo. - Susurre en tu oído mientras depositaba leves besos en aquella zona.

-V-Víktor... Y-Yo te amo mucho más. - Repetías tratando de acallar aquellos sonidos que yo te provocaba sabiendo que a los dos nos gustaba aquello. La temperatura subía más y más, junto con ello nuestras caricias.

Suaves toques en tus caderas, en tus piernas, en tu pecho, adoraba dejarte marcas por todo tu cuerpo, adoraba tanto el reclamarte de mi propiedad.

En aquella habitación se escuchaban solos los gemidos de placer combinados con amor, nuestro tan dulce, puro y mal visto amor, a pesar de eso no nos importaba, los dos nos amábamos estuviera o no correcto, sea o no bueno para la vista de la sociedad.

__

El tiempo no perdona amor mío, sé que hubieras deseado mi bien, hubieras deseado que yo siguiera y no estuviera estancado como lo estoy ahora.

Nuestro tiempo juntos, nuestros tantos momentos de pareja... Cómo lo extraño.

Me repito en todo momento "¿Dónde estás? ¿Por qué te vas?" Y mi subconsciente me mata, me lo recuerda de la manera más horrible, dime mi tesoro... ¿Por qué? ¿Por qué tenías que ser tú y no otra persona? ¡Dios, ¿Por qué?! ¡¿Por qué no fui yo?! Todos me habían abandonado y tú... Tú, amor, tú fuiste la única persona que se quedó cuando yo estaba en el suelo, te recostarse a mi lado tomando mi mano mientras veía la manera de resolverlo, tomados de la mano viéndonos a los ojos y sonriéndonos a pesar de todo lo malo que se aproximaba para ambos aunque más para mí.

Nuestra historia juntos, nuestro romance en flor de piel... ¿Por qué todo lo bueno está en nuestros años de universidad e incluso siendo mayores después? ¿Cuál es el caso ahora? ¿Qué pasa después? Nada, tú te fuiste y yo me he quedado aquí viendo la tierra mojada sin importarme si llego a empaparme o no, sin importarme realmente... Si me enfermo, pues si lo hiciera estaría a unos cuantos pasos de ti.

Esto es tonto ¿no lo crees? Hay alguien que está conmigo todo el tiempo y yo aun así siento que te estoy engañando, no me gusta esa sensación de intranquilidad. Dime ¿por qué? Sé que deseas que sea feliz con alguien más pero... No quiero engañar tu recuerdo, no quiero que alguien más se lleve nuestro tiempo, no quiero que nadie se lleve aquellas caricias especiales para ti, aquellos encuentros que tanto placer y amor nos causaban...

Todas esas escrituras en las paredes de mi habitación, cada una de ella sabe nuestra tragedia y llora por las noches al igual que yo.

(...)

Hoy he venido a tu tumba junto con aquella persona, ella acepta que tú eres una de las personas más importantes en mi vida.

Es gracioso, ya que aquel rubio de ojos verdes - azulados tiene tu nombre, fue una coincidencia y en un principio me dio miedo pero... Lo comprendí.

He venido hoy mostrándote por fin la hermosa familia que una vez prometiste tendría. Hubiera deseado que fuera contigo pero... Estoy bien así, he decidió darle el nombre que tú querías ponerle a nuestros hijos "Liven" si era niña y "Raven" si era niño, pienso que son unos nombres hermosos... justo como tú.

Hoy me despido... formalmente amor mío... Sé que un día nos volveremos a encontrar, hasta entonces espérame.

Te amo... Yuuri Katsuki, el hombre que he amado por primera vez y él único que estará en mi corazón.

Sin importar cómo, dónde y con quién esté, amor mío.

Adiós.