Stalking

Capitulo 1

<<Es ahí cuando en aquel bosque oscuro y tenebroso me encontraba corriendo, huyendo de "eso" que me perseguía, después de recorrer mucho y profundizarme más en aquel bosque me encontré una cueva, me metí en ella sin saber que ahí era donde vivía "eso" que me perseguía, al ver que no tenía escapatoria solo veía la silueta de aquella cosa apuntó de entrar y atraparme...>>.
Alex despertó dando un salto, inhalando desesperadamente mientras sentía las gotas de sudor que recorrían su cuerpo. Después de controlar su cuerpo de aquella pesadilla se levanto de la cama para ver el reloj, dio un brinco de la cama para ir directo al baño y meterse en la ducha.
Abrió la llave de la regadera, mientras apoyaba sus manos en la cabeza cerró los ojos para recordar aquella pesadilla, intentó recordar la sombra borrosamente pero era inútil no la podía imaginar.
Al salir de la ducha con una toalla rodeándole la cintura se dirigió a su armario para de este sacar una playera negra, un pantalón entubado de mezclilla y unos tenis blancos. Se colocó la muda que había sacado para después dirigirse a un espejo del cuarto y colocarse un collar con un dije que le había regalado su ex novia.

Se fue a la universidad como siempre en un transporte público, mientras veía perfiles de Facebook en su smartphone,  guardaba algunas fotos, veía algunos estados, hasta que por fin llego a una chica que le llamó bastante la atención, su nombre era melana vivía en la misma ciudad que él y tenían un amigo en común, está en sus fotos se mostraba muy natural (pero no era fea), Alex le mando una solicitud de amistad, no pasó ni dos minutos para que esta lo aceptara, después de aceptarlo le mando un mensaje:

Melana: Hola, ¿quién eres?. 

Alex: Hola soy Alex, probablemente no me conozcas, pero tu foto de perfil me llamó mucho la atención.

Melana: Oh enserio, ¿porque?.

Alex: Bueno eres muy linda.

Melana: Oh gracias, tú tampoco estás nada mal. 

Alex llegó a su destino, en eso dejo de hablar con la chica para bajar del camión, al bajar rápidamente se dirigió a la entrada de la universidad.Al entrar caminó hasta su clase que comenzaba dentro de veinte minutos. Llegó a su clase, tomó asiento mientras acomodaba su mochila y esperaba al chico que se sentaría a un lado de él, se acordó de que no él había contestado a aquella chica, sacó su teléfono para ir a la conversación.

Alex: Oh gracias. ¿Cuántos años tienes?.

Melana: Casi 20, ¿y tú?

Alex: 20, Oh valla eso significa que también vas en la universidad.

Melana: Si, ¿en qué universidad vas?

Alex: voy en la que está cerca del lago con forma de pez.

Melana: ¡Oh ya!, yo estoy en la que se encuentra al sur de tu universidad.

Alex: Pues no estás tan lejos que digamos. Si quieres podemos vernos hoy.

Melana: No lo creo, apenas te conozco se me haría un poco extraño.

Alex: Bueno después de conocernos mejor, podemos ir a un café en el centro.

Melana: Me parece bien, bueno te dejo, ya llego mi profesor.

Alex: Bueno, adiós.

Este vio la hora, miro hacia las escaleras para ver si no venia su amigo de cabello castaño y ojos miel, Dajan, efectivamente este venía subiendo las escaleras escuchando música con su audífonos, El chico voltio a ver a Alex y ambos sonrieron.

-Hola idiota, ¿Cómo estás?- dijo Dajan para después chocar su mano contra la de Alex en son de amistad.

-Bien ¿y tú?, loco.- Dijo Alex recorriéndose para que Dajan se sentará.

-Pues bien, oye no vas a creer lo que me pasó esta mañana. - comentó el castaño

-¿Qué pasó?- Dijo el moreno aguantándose la risa, ya que cada vez que Dajan le contaba algo a este significaba que algo gracioso venía.

-Cuando baje las escaleras a comer un poco de cereal Zeus (su perro de Dajan) dejó su peluche en un escalón, lo pise y caí- dijo el chico rascándose la cabeza.

Alex soltó una carcajada. - Joder, ¿y acaso no viste el mendigo juguete?- dijo tomando aire.

-No, si lo hubiera visto no me hubiera caído.

-Pero, ¿Te encuentras bien?- preguntó Alex dejando las risas aún lado.

-Si, solo me duele un poco la espalda.- respondió el castaño

Al terminar de decir eso entró el profesor al salón y todos se acomodaron en sus respectivos lugares.