Capitulo único.

773 86 47
                                    

—¡¿Qué?!—la voz chillona y algo molesta de Hayama Kotaro resonó por todo el gimnasio de la secundaria Rakuzan.

Akashi agradeció que solo estaban ellos junto a Reo y Nebuya; la práctica había terminado temprano.

—Baja la voz, Kotaro.—dijo Reo, tratando de disimular tranquilidad, aunque por dentro estaba igual de sorprendido que su amigo.

—¿Ehhh? Akashi, ¿nunca has besado?—preguntó Nebuya mirando sorprendido a su capitán.

—Umh...no lo veo muy necesario.

Era increíble pensar que su capitán, el absoluto Akashi Seijuro nunca había besado a nadie; con aquél rostro hermoso, ojos que llamarían​ la atención de cualquiera y facciones casi perfectas.

Nunca había visto necesario el contacto labial con otra persona.
¿Por qué tanto escándalo?
No es como si fuese a morir solo y virgen, su padre ya tenía casi asegurado quién sería la joven que con la cual compartiría el resto de su vida.
No le agradaba la idea de casarse solo por negocios de por medio, pero nunca se atrevió a contradecir a su padre.

—No puede ser.—volvió a exclamar el chico.—¡No puedes seguir así como si nada sin saber que se siente besar!

—Tampoco es para tanto.—trató de calmarlo Reo mientras empujaba a Kotaro lejos de su capitán.

—¡Claro que es para tanto!—logró zafarse del agarre de su compañero de equipo.

Kotaro se puso delante de Akashi con una mirada completamente decidida.

—¿Qué sucede?—decidió preguntar al ver que el otro no hablaría.

El silencio del chico siguió unos cuantos segundos más hasta que terminó de pensar.

—Bien, está decidido.—sin decir nada más tomó con delicadeza las caderas de Akashi para poder acercarlo más a su cuerpo y cuando puso su mano en la mejilla del pelirrojo una voz gritó:

—¡¿Qué demonios le haces a Sei-chan?!—como si de una madre sobreprotectora se tratase, Reo alejó a su capitán de las garras de aquél animal que amenazaba con atacar a su cría.

—¿Ehh? ¿Por qué hiciste eso Reo-nee?—reclamó el rubio mientras su compañero abrazaba de manera protectora a Akashi.

—¡Jamás permitiré que le hagas algo impuro a Sei-chan!

—¡No es nada impuro!—se defendió.—Solo quería mostrarle cómo se siente.

—Nadie te pidió que lo hagas.—le contestó aún rodeando el cuello de Akashi con sus brazos.

—Ohh, si es sobre besar entonces...—Ekichi sonrió y dió un paso.

—Ni se te ocurra.—un aura maligna provenía de el vice capitán del equipo de Rakuzan.

—¿Entonces lo harás tu, Reo-nee?—preguntó Kotaro intrigado.

—¡No lo hará nadie!—abrazó a Akashi más fuerte y este se quejó un poco.—Además, yo veo a Sei-chan como a un hijo.

—Vamos, déjame hacerlo Reo-nee.—rogó mientras veía como su vice capitán aún abrazaba al capitán.—Solo es un beso.

—¡Akashi-cchi!—una voz bastante familiar se escuchó y rápidamente el pelirrojo fue arrebatado de los brazos de su supuesta madre.

—¿Kise?—Akashi preguntó mientras era abrazado por el rubio.—¿Qué haces aquí?

—¡Acabo de salir de una sesión de fotos y decidí visitarte!

Primer besoWhere stories live. Discover now