Jaune

Jaune - Amarillo

Amarillo, fue lo primero a lo que le presté atención cuando llegamos a esa mansión. Ese uniforme ajustado y su alborotada y corta cabellera eran de un color tan vivo, contrastante con el resto de la sombría estancia. Nos volvimos colegas en un inusual ambiente laboral, ¿con que frecuencia puedes alardear de trabajar junto a un vampiro? Se ganó el aprecio de todos por su amabilidad y preocupación en cada una de las misiones que teníamos, se volvió la niñera de los gansos.

—  ¡Es un pervertido!
—  Soy un amante del buen arte, mignonette, no es lo mismo.

Era imposible no admirar su cuerpo tan bien proporcionado, oculto por las ajustadas prendas que componían su vestimenta habitual. ¿A quien se le ocurrió que era una buena idea mandar a una mujer tan sensual a matar monstruos vistiendo minifalda? No lo sé, pero que dios lo bendiga.

Las bromas eran el pan de cada día, ella no entendía el doble sentido que hombres de mundo como nosotros empleamos como una lengua natal, su ingenuidad al momento de tratar con el sexo masculino era tan divertida, nos alegraba la estancia en Hellsing, nos hacía olvidar que solo éramos carne de cañón enviada al matadero para combatir demonios y no-muertos.

— ¿Qué no se supone que son perros de guerra?
— Antes que eso, soy tu capitán. No lo olvides, Victoria.

Ella era tan espontánea, actuando precipitadamente y diciendo lo que pensaba sin contemplar las posibles represalias hasta que era tarde. Varias veces desafío mi autoridad, podría ser un vampiro, pero yo seguía siendo su superior.

Jaune, ese era el color de su ropa y el de su cabello, como las espigas de trigo que llenaban los campos franceses donde crecí. Ella me hacía rememorar lo mejor de mi infancia, antes de que me volviera la escoria de la tierra. Todo fue tan sutil, tan natural, que me enamoré de ella antes de poder hacer algo al respecto.

— ¡ A veces hace que lo odie, capitán Bernadotte!
— Para que odiarnos, si podemos pasar una y mil noches amándonos bajo las perfumadas sábanas de mi alcoba.
— ¡Jamás!

Ella es un vampiro y yo un simple mercenario, un mortal que dejará de respirar en algún momento, pero sé que la última visión que tendré antes de exhalar mi último aliento será a mi querida Seras Victoria, vistiendo con su entallado uniforme amarillo.

***************************
Jaune: amarillo en francés.