Prologo (27 de agosto de 2016)

22 3 2
                                    

3:12 AM, la hora en la cual una chica normal debería estar dormida, pero no, aquí estoy yo, Regina Smith despierta en la densa oscuridad de mi alcoba, con la boca tan acartonada que hace parecer a mis labios como un pequeño trozo de carne seca, después de unos minutos indecisa sobre levantarme a beber un poco de agua o intentar dormirme otra vez decido no levantarme y quedarme ahí, con la idea de poder entrar a ese pequeño mundo en el cuál cualquier tipo de cosas pueden suceder, a pesar de eso sé que mi intento fracasará, así que solo me limito a abrazar mis rodillas y quedarme en silencio, llevo casi una semana completa sin poder conciliar el sueño, no se a que se pueda deber, tal vez al estrés de la preparatoria o el hecho de escuchar y ver a mis padres gritarse todos los días a toda hora.

Frente a mi cama está un pequeño ropero de mi niñez con un espejo, a pesar que es de madrugada puedo verlo ahí, sumergido en este mar negro dentro de mi cuarto, ahí justo frente a mí, lo veo y aunque quiero apartar la mirada de el hay algo que no me deja, me veo a mi misma mirándome a los ojos, algo un poco extraño a esta hora, pero nace algo dentro de mí que me obliga a levantar la mano, lo hago, poco a poco levanto el brazo izquierdo mientras veo mi reflejo, en esa inmensa masa de color negro que me rodea, me concentro en la yo que esta frente a mí, examino su brazo poco a poco con la mirada y puedo notar como lentamente se empiezan a desprender pequeños trozos de él, parpadeo fuerte y rápidamente, debo estar alucinando debido a tanto estrés, pero abro los ojos y ahí está de nuevo, las pequeñas partes de piel de mi brazo cayendo como si fueran hojas secas en un árbol viejo, llevo mi mirada lentamente hacia los ojos de mi reflejo y puedo apreciar claramente un tono rojo sangre en ellos, sin embargo no puedo dejar de mirarlos; incrédula y no teniendo control sobre mi cuerpo me voy acercando lentamente al espejo hasta que está a solo unos cuantos centímetros de mí, levanto un poco mi mano a altura de la cara y la acerco lentamente al reflejo, poco a poco siento como las yemas de mis dedos tocan el frio cristal, coloco toda mi mano con suavidad, hasta que cada centímetro de ella está tocando el trozo perfectamente cortado de vidrio, giro lentamente la cabeza hasta llegar de nuevo hacia mi cara, admito que suena algo extraño tener miedo de mirarme a mí misma a los ojos pero así era, lo tenía, me miré y lo que vi me hizo retroceder a toda velocidad hasta la testera de mi cama, logré ver aquellos ojos rojos frente a mí, los vi tan cerca, con un brillo de maldad en ellos, esos ojos, dentro de mi cara, pero mi cara estaba deformada, al igual que mi brazo se estaba pudriendo, se caía a pedazos y tenía un color grisáceo.

Llena de miedo busqué a tientas el interruptor de la luz al lado de mi cama y lo encendí, volví a mirar al espejo, y ahí estaba yo, completamente normal, con mi piel en un buen estado y mis ojos cafés como en realidad deben ser, me quedé perpleja lo que restaba de la noche, estaba segura de lo que había visto en ese espejo, podría jurar que había visto al demonio a los ojos. 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Jun 04, 2017 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Dentro del vidriero.Where stories live. Discover now